Cumplidos tres meses después del grave accidente que sufrió Egan Bernal en la vía de Gachancipá, Cundinamarca, los aprendizajes del ciclista y el agradecimiento suyo y de su familia al personal médico por salvarle la vida, es cada vez más notorio.
Si bien hubo momentos de angustia y mucha expectativa por saber lo que pasaría con el futuro profesional de Egan y su retorno a las carreteras colombianas y del mundo en bicicleta, hoy todo es tranquilidad y optimismo en su entorno más cercano, teniendo en cuenta que su madre estuvo acompañando cada paso de su rehabilitación y mantuvo la fe en que su vida volvería a la normalidad.
Es así como Flor Marina Gómez, madre del actual campeón del Giro de Italia, compartió un sentido mensaje en su cuenta de Instagram, en el que acompañó un nostálgico relato de lo ocurrido desde aquel 24 de enero hasta la fecha:
“Sentí perder a mi hijito...”
“El día del accidente por un momento sentí perder a mi hijito, fue el dolor más grande que he sentido en mi vida, pero dice el dicho que (no se sabe lo fuerte que eres hasta que la vida te obliga a serlo) pero Dios nunca nos desamparó y aquí estamos”, inició la madre del único campeón colombiano del Tour de Francia.
“ÉL es el niño más fuerte que pueda conocer. Siempre con la FE intacta, fuerte, aferrado a la vida y con deseos de cumplir y luchar por tantos sueños. Qué felicidad siento al ver que ya lo está haciendo. Él siempre será mi motivación, mi ejemplo y sin duda mi superhéroe”, agregó.
“Ahora solo queda el recuerdo de esta no tan Buena experiencia, pero, eso sí, sacando lo positivo y es el agradecimiento con DIOS, y a cada una de las personas que estuvieron ahí haciendo parte de su recuperación,🙏🏼🙏🏼🙏🏼🙏🏼”, finalizó Gómez tras una nostálgica secuencia de imágenes en la que se la ve tomando a Egan de la mano; dándole de comer una paleta mientras permanecía en una camilla; llevándole unas rosas y acompañándolo en el lanzamiento del Proyecto Social y Deportivo “EB Project” en días recientes:
“Nos dijeron que podía quedar en silla de ruedas, pero nunca temí por su vida”
Tan solo dos semanas después del choque a alta velocidad contra el autobús parqueado en la autopista en la que Egan entrenaba junto a sus compañeros del equipo Ineos Grenadiers, Flor Marina habló con Noticias Caracol sobre cómo fue el momento en el que se enteró del accidente de su hijo y reconoció que pese a que los pronósticos médicos no eran del todo alentadores, siempre supo que Egan sobreviviría al accidente:
Estas fueron sus palabras al respecto el pasado 8 de febrero:
El momento más difícil de estos 15 días fue cuando el cirujano nos reunió, nos dio a entender la gravedad del accidente. Nos dijo que él entraba a cirugía, pero que probablemente podía quedar en silla de ruedas. Nunca temí por la vida de mi hijo y aunque sabía la gravedad del accidente, siempre tuve mucha fe que se iba a levantar de ahí
Pese a la mala señal que trajo el accidente de Egan, Flor también aseveró que no tuvo dudas en la fuerza y resiliencia del deportista de 25 años. Con la fe puesta en Dios, su progenitora agradeció al Todopoderoso y está feliz de poder hacerle compañía mientras todo vuelve a la normalidad:
Después de ese accidente tan duro que tuvo mi hijo, lo único que puedo sentir es agradecimiento con Dios por permitirnos tenerlo nuevamente en casa
SEGUIR LEYENDO: