El uso de caballos en coches turísticos en Cartagena ha sido un tema de debate por muchos tiempo. Mientras hay quienes defienden esta práctica, animales y defensores de animales han manifestado su descontento con la utilización de los equinos para este fin.
La molestia se ha dado, sobre todo, porque en numerosas ocasiones se han conocido casos de maltrato físico con estos caballos. En distintas ocasiones, a través de redes sociales internautas han denunciado abusos en los horarios en que los equinos son empleados en los coches turísticos.
En otros momentos, se han conocido casos de cocheros que exceden el número de pasajeros, generando una carga mayor a la que debería soportar cada caballo que es utilizado para mover los coches.
Debido a estos y otros problemas que afectan la integridad de los caballos, la Procuraduría General de la Nación le solicitó al alcalde de Cartagena, William Dau Chamat, un plan de atención integral en el que se garanticen las condiciones de salud y buen trato a los equinos utilizados en el servicio de los coches turísticos en la ciudad.
En desarrollo de una acción preventiva, la Procuraduría Provincial de Cartagena reiteró la necesidad de que entidades como el Departamento Administrativo Distrital de Salud (Dadis), la Unidad Municipal de Asistencia Técnica Agropecuaria (Umata) y el Departamento Administrativo de Tránsito y Transportes (DATT), adopten las medidas que les corresponden.
Lo anterior, para garantizar la prestación del servicio de coches turísticos en las condiciones adecuadas, las cuales están establecidas en los decretos distritales 0656 y 1273 de 2014, que buscan prevenir accidentes que afecten a los equinos.
El Ministerio Público señaló, en la comunicación enviada al alcalde de Cartagena, que las pesebreras donde permanecen los caballos usados para prestar este servicio, no cuentan con las condiciones establecidas por las autoridades de salud.
De acuerdo con la Procuraduría, esta no es la primera vez que se hace un llamado a la administración municipal por este mismo tema.
“Las condiciones de operación de las pesebreras de Chambacú y Marbella no cumplen con los lineamientos establecidos por la autoridad de salud (Dadis), aspecto reiterativo en los tres informes allegados por esa autoridad”, señaló la Procuraduría en el documento enviado a la Alcaldía de Cartagena.
Algunas de las irregularidades citadas por la Procuraduría
La Procuraduría, citada por el diario local El Universal, hizo las siguientes observaciones sobre las condiciones en las que permanecen y son utilizados los caballos en Cartagena:
- No se evidencia resultado de los pesajes de coches en concordancia con el artículo décimo primero, que señala que el peso de los coches junto con los aperos no deberá ser superior a las 525 kilos.
- No se advierte que se tengan definidas y/o delimitadas y/o señaladas en uso real y material ni controladas las zonas de estacionamiento.
- Tres coches cuentan con un solo equino asignado. Le interesa: Caballos cocheros: el informe que podría poner en jaque a este servicio
- Tres equinos no cuentan con microchip de identificación.
- Cuatro equinos presentaron incidentes y/o caídas y/o resbalaron en el Centro Histórico.
- Veinte caballos superan la edad establecida en los decretos que regulan la actividad de cocheros turísticos.
Así mismo, el Ministerio Público aseguró que las pesebreras de Chambacú no cumplen con la evaluación de riesgos físicos generales, riesgos físicos biológicos, ni ocupacionales.
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