Alrededor del mediodía de este 26 de abril inició el debate de moción de censura contra el ministro de Defensa, Diego Molano, para que responda por el presunto caso de ejecuciones extrajudiciales, también conocidas como ‘falsos positivos’, que habría ocurrido a finales de marzo en Putumayo. El debate es adelantado en la Cámara de Representantes y congresistas de oposición y habitantes de la zona donde se registró la masacre han intervenido para señalar como vergonzoso el hecho.
La masacre por la que es cuestionado Molano ocurrió el 28 de marzo en la vereda Alto Remanso, adscrita al municipio de Puerto Leguízamo (Putumayo). Se conoció que las víctimas estaban en un bazar, cuyo objetivo era recolectar fondos para costear una placa-huella en su barrio, cuando los uniformados los atacaron indiscriminadamente.
Inicialmente se habló de 11 muertos, pero según la representante por el Partido Verde Katherine Miranda esta cifra habría aumentado a 13. La congresista se respalda en cifras de la Defensoría del Pueblo que aseguran que Daniel Eduardo Paredes y Lisandro Paredes San Juan, oriundos de Puerto Leguízamo, también fueron presentados como guerrilleros muertos en combate cuando “tenían libreta militar de primera clase”.
“Señor ministro: hablemos de que hay dos cadáveres más, hay dos muertos más señor ministro, no lo dice la oposición, lo dice el último informe de la Defensoría del Pueblo. Ministro a la lista que usted le dio a los medios de comunicación, le falta Daniel Eduardo Paredes y Lisandro Paredes San Juan”, dijo Miranda.
La representante también aseguró que ninguno de los muertos en el operativo tenía antecedentes judiciales y ni estaba siendo buscado por la Fiscalía. Así mismo, no reportaban requerimientos en Procuraduría, ni en Policía ni en la lista Clinton de Estados Unidos.
Esta afirmación fue reforzada por Aníbal Eduardo Cuellar, habitante y líder social de la vereda El Alto Remanso, cercano a quienes murieron en la masacre. El activista aseguró que es víctima del hecho y pidió que haya justicia y verdad para que se pueda esclarecer el operativo.
“Soy el reemplazo del difunto presidente Didier Hernández Rojas, asesinado en la vereda Alto Remanso y soy víctima de la masacre. En este momento me encuentro parado al frente a todos ustedes para que me reconozcan y sepan que no soy alias Bruno como me señaló el hombre de negro. De corazón les pido que se haga justicia”, aseguró.
Posteriormente, también intervinieron los congresistas de oposición María José Pizarro e Inti Asprilla, quienes señalaron que desde MinDefensa y las Fuerzas Armadas “se dio la orden de disparar sin tener en cuenta el principio de distinción”. Por esto, pidieron que Molano sea retirado de su cargo.
Una vez ambos congresistas expusieron sus puntos, el debate se empezó a salir de control. Miembros de la oposición reportaron que la Policía estaba ingresando a la sala, hecho que es prohibido y puede ser tomado como una forma de coacción contra ellos. En ese momento los representantes empezaron a discutir y exactamente a las 2:50 p. m. se ordenó un receso de 10 minutos.
Al volver en sesión, empezaron a intervenir los representantes de la bancada de Gobierno, el Centro Democrático, que defienden a Molano. Ellos aseguraron que la operación en Putumayo fue legítima.
“No son unos angelitos los que van a esos bazares”, dijo el representante Juan David Vélez.
Por su parte, y alineado con lo que dijo Velez, el representante Juan Manuel Daza Iguarán, también del Centro Democrático, cuestionó si de verdad las víctimas del hecho eran campesinos.
“Hablan de campesinos, pero cuáles son los cultivos que se encuentran en el área. ¿Hay alguno que sea de pancoger? Los pintan así (como campesinos) pero tienen cómo pagar el whisky. Y como dijo alguien aquí, eran más de 10 cajas de Buchanan’s que en el sector comercial, es de fácil acceso, y de eso yo sé bastante porque vengo de una región donde lo consumimos mucho, y una sola caja vale 1.800.000 pesos, es decir, que se gastaron 18 millones de pesos en whiskey”, dijo Daza.
El representante hizo la acusación a pesar de que Isaías Acosta Ledesma, víctima y habitante de la vereda Alto Remanso, intervino al iniciar el debate y aseguró que no era guerrillero. Incluso, el campesino, junto a otros de sus compañeros víctimas de la acción militar, solicitó que no se les revictimizara, pedido que fue ignorado.
La tarde avanzó con otras intervenciones de congresistas que defendieron a Molano y al Ejército Nacional. Hasta las 6:00 p. m. fue el turno de hablar del ministro Molano.
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