Reportan otro cadáver abandonado en una vía pública del centro de Bogotá durante esta Semana Santa

Un nuevo macabro hallazgo llevaron a cabo las autoridades en el centro de la capital colombiana, donde encontraron un cadáver en las inmediaciones de la calle 26 con carrera 30.

Según señalaron en el informativo de televisión Citynoticias, del canal local City T.V., la Policía Metropolitana de Bogotá confirmó la ubicación del cuerpo sin vida y de acuerdo con versiones de algunos testigos que dieron aviso a las autoridades, correspondería al de un hombre que estaba maniatado.

La coronel Sandra Lancheros, comandante de la Policía de la localidad de Teusaquillo, señaló en ese noticiero que la Seccional de Investigación Criminal (Sijín) y la Fiscalía General de la Nación quedaban a cargo de la investigación por este caso. Mientras que el cuerpo ya se encuentra en Medicina Legal.

Este hecho se suma al de la ubicación, el pasado Domingo de Ramos, de dos cuerpos más dentro de bolsas plásticas en cercanías de la Plaza España, también en el centro de la ciudad.

El comandante de la Policía Metropolitana, general Eliecer Camacho, aseguró que estos hechos estarían relacionados con microtráfico.

Un reciclador de la zona encontró los cadáveres y alertó a las autoridades, las cuales llegaron para realizar el levantamiento e inspección del sitio.

“Ayer se presentó el asesinato de dos personas y la localidad de Mártires más exactamente en el sector de plaza España. Estas personas fueron encontradas por las unidades policiales en dos bolsas y las cuales posteriormente fueron verificadas por parte del Cuerpo Técnico de Investigación (CTI) de la Fiscalía”, explicó el alto oficial.

Además, el general Camacho mencionó que: “De acuerdo a las labores que tenemos en materia de inteligencia, podría tratarse de una retaliación entre grupos criminales a raíz de unas afectaciones que se vienen haciendo contra las estructuras en esta localidad, con el fin de radicar esas zonas de miedo donde ellos han venido realizando actividades criminales, como tráfico de estupefacientes”.

Por su parte, algunos vendedores ambulantes del sector se pronunciaron. “La forma como fueron hallados los cuerpos se deben al mictrotráfico porque se sabe que alrededor de ese parque venden mucho vicio. A ellos les dan un plante, si lo desaparecen pues llegan y los matan porque quedan mal con el proveedor”, señaló un vendedor en diálogos con La FM.

Al inicio de este mes también se había encontrado otro cuerpo en el sector de Voto Nacional, que corresponde al mismo sector de la ciudad, luego de que las autoridades fueran alertadas por la comunidad, porque había sido abandonado un paquete que temían fuera un explosivo.

En la emisora RCN Radio informaron que la alerta se dio por el temor que hay entre en los habitantes de la ciudad de que nuevamente ocurra un atentado terrorista como el que ocurrió recientemente en el CAI de Arborizadora Alta, en la localidad de Ciudad Bolívar, sur de Bogotá, y que tuvo como consecuencia la muerte de dos niños y más de 30 heridos.

Ante la emergencia, al lugar llegaron expertos antiexplosivos del CTI que se encargaron de verificar el paquete que había sido dejado debajo de unas canecas de basura exactamente en la calle 12 con carrera 16, según reseñaron en el informativo de televisión Noticias RCN.

Inicialmente, para descartar que tuviera un contenido que hiciera detonación, enviaron a un robot y dieron una nueva revisión, con la que se confirmó que no revestía peligro para los agentes que llevaban a cabo la verificación.

Pero cuando lo revisaron manualmente se llevaron la horroroza sorpresa de que se trataba del cuerpo sin vida de una persona, de acuerdo con lo que consultaron en el diario El Espectador en el CTI.

“Se descartó la amenaza de artefacto explosivo, pero se halló en el lugar un cuerpo sin vida, el laboratorio del CTI de inspección a cadáver realiza levantamiento”, indicó uno de los investigadores a ese medio de comunicación.

Policías indicaron también en ese diario que el cadáver estaba en bolsas negras, que a su vez fueron guardadas dentro de un costal. La víctima, reseñaron también en El Espectador, tenía signos de tortura y estaba amarrado.

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