Avanza la celebración de la Semana Santa en Colombia y, con ello, miles de personas se movilizan por distintas regiones para acudir a las actividades religiosas organizadas por las iglesias católicas. Según informó el Ministerio de Transporte, está proyectado que al menos 8.326.792 vehículos circulen por las principales carreteras del país, razón por la cual las autoridades de tránsito han insistido en la importancia de tomar todas las medidas de seguridad.
No obstante, mientras se ultiman detalles para recibir a los feligreses en las congregaciones del Jueves y Viernes Santo, y el Domingo de Resurrección, una problemática ha despertado la incertidumbre entre distintas parroquias en el territorio nacional: la escasez de hostias para atender la alta demanda por estas fechas.
Según manifestó el teólogo Luis Fernando Cuartas, en entrevista con Blu Radio, la bolsa de mil hostias, que habitualmente costaba 9.000 pesos, ahora ronda los 12.000 pesos. “La inflación ha incidido en los envíos, porque el precio de las casas comerciales que las llevan se elevó muchísimo. Necesitamos unas 60.000 hostias de mucha urgencia que lleguen lo más pronto”, dijo.
Este panorama ha llevado a que las iglesias inicien distinas campañas para facilitar el suministro de tal producto, especialmente a los establecimientos religiosos con menores recursos. La Arquidiócesis de Medellín, por ejemplo, que cuenta con más de 200 parroquias, cárceles, orfanatos, seminarios y asilos es una de las más perjudicadas por la falta de hostias.
Así mismo, Cuartas manifestó que se han mandado unidades a “Caldas, Jericó y el nordeste antioqueño, hasta los límites con Norte de Santander. Hemos enviado también a Monte Líbano y cubrimos todo el Chocó a través de las Diócesis de Quibdó e Istmina Tadó”.
La Guajira y el Amazonas son otras de las regiones que generan especial preocupación, pues, aparte del aumento de los precios, se le deben sumar los altos costos de envío.
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Los productos que más han subido de precio en lo corrido del año:
A principios de abril, el Departamento Administrativo Nacional de Estadística (Dane) informó que el índice de precios al consumidor (IPC) tuvo una variación del 1 %, representando un aumento de casi el doble si se compara con el mismo mes de 2021, cuando se ubicó en 0,51 %.
De esta forma, la inflación anualizada en Colombia, en marzo de este año, se ubicó en el 8,53 %, más de 5,6 puntos porcentuales en comparación con las cifras registradas en marzo de 2021, donde fue del 1,51 %. Las mayores variaciones se presentaron en las divisiones alimentos y bebidas no alcohólicas (2,84 %) y muebles, artículos para el hogar y para la conservación ordinaria del hogar (1,83 %).
Los nuevos indicadores han afectado directamente el bolsillo de los colombianos, puesto que han sido múltiples los reportes de la ciudadanía sobre los aumentos en los costos de los alimentos.
Las alzas más importantes se presentaron en las subclases: papas (110,22 %), yuca para consumo en el hogar (85,14 %), plátanos (82,57 %), cebolla (10,65 %) y moras (9,60 %). Los menores incrementos de precio se reportaron en las subclases: arroz (0,54 %), arracacha, ñame y otros tubérculos (0,83 %) y concentrados para preparar refrescos (1,55 %). También se deben sumar a las subclases: comidas en establecimientos de servicio a la mesa y autoservicio, con 0,95 %; carne de res y derivados, con 0,71 %, y electricidad, con 0,44 %.
Entretanto, las mayores disminuciones de precio se reportaron en las subclases: carne de cerdo y derivados (-2,34 %), zanahoria (-1,70 %) y bananos (- 0,32 %). Así mismo, las subclases con las menores contribuciones fueron las pertenecientes a servicios de comunicación fija y móvil y provisión a internet, con -0,43 %; prendas de vestir para mujer, con -0,06 %; e inscripciones y matrículas en carreras técnicas, tecnológicas y universitarias, con -0,04 %.
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