La defensa del dragoneante del Inpec, Víctor Cervera Piratoba, denunció que la Fiscalía General de la Nación no ha querido entregarle la totalidad de las pruebas del proceso que se adelanta en contra de su cliente, aún y cuando aquella acción está estipulada por la ley. Cervera se encuentra señalado de ser uno de los uniformados que, presuntamente, torturó a reclusos de la cárcel La Modelo. El hombre se encuentra en detención domiciliaria y es investigado haber golpeado en el rostro a un preso que se encontraba internado en el Hospital La Samaritana de Bogotá luego de los disturbios ocurridos en entre el 20 y el 21 de marzo de 2020.
“Estamos en un juicio en el que posiblemente mi cliente afrontaría 30 años de prisión y a la fecha todavía no se ha hecho el descubrimiento completo, ni suficiente, ni de forma clara. La respuesta es ambigua y superficial (...) Desconocemos quiénes sean otras víctimas y la razón por la que la Fiscalía abiertamente manifieste que no ha hecho el descubrimiento sobre esas otras víctimas”, dijo la penalista Ahalia Quintero. Para el próximo 25 de abril está programada la preparatoria de juicio.
El detenido hace parte de otros uniformados acusados de agredir a personas detenidas en aquella cárcel. El motín se dio porque los reclusos pedían reforzar las medidas sanitarias contra el COVID -19. De acuerdo con el documento presentado por la Fiscalía General de la Nación el drogoneante Julián Alberto Piñeros Gómez estaría involucrado en dos de los casos de tortura. Al parecer, “el guardia golpeó y esposó desnudo a un privado de la libertad”, quien había sido señalado de participar en el motín. “Lo habría sometido en cuclillas durante varias horas y lo lesionó con un arma cortopunzante”, explicó la entidad a través de un comunicado.
Piñeros, comentó el ente acusador, “supuestamente, le propinó puños a un interno que estaba herido con un proyectil de arma de fuego y le cortó el dedo índice de la mano izquierda”. Víctor Alfonso Cervera Piratova y Jefferson Fabián Hueso Escárraga habrían participado de esta última acusación. El ente judicial afirmó que, “presuntamente, atacaron con la tonfa o bastón de mando a dos privados de la libertad que estaban en el hospital La Misericordia” debido a las heridas que recibieron con armas de fuego durante la manifestación carcelaria. “Estos dos hombres habrían recibido múltiples golpes mientras estaban esposados en una camilla. Cuando regresaron al establecimiento carcelario fueron castigos violentamente”, añadió la Fiscalía.
Julián Alberto Piñeros Gómez, Víctor Alfonso Cervera Piratoba y Jefferson Fabián Hueso Escárraga fueron capturados por la Fiscalía el pasado 24 de octubre de 2021. Un juez de control de garantías decidió, en ese momento, que Piñeros Gómez cumpliría la medida de aseguramiento en un centro carcelario; y que Cervera Piratoba y Hueso Escárraga serían beneficiados con detención domiciliaria mientras continuaba la investigación.
Durante la manifestación carcelaria de marzo de 2020, se comentó para aquellos días, murieron 24 presos y 107 personas resultaron heridas, de estas últimas, 76 eran detenidos y 31 guardias penitenciarios. El motín se presentó por la necesidad de los presos de buscar un trato digno en medio de la pandemia de coronavirus. El hacinamiento no permitía que aquellos ciudadanos pudieran cumplir con las medidas establecidas por las autoridades sanitarias, entre ellas, el distanciamiento social para evitar los contagios.
Human Rights Watch elaboró un documento en el que señaló que al analizar los 24 informes de necropsias que emitió el Instituto Nacional de Medicina Legal y Ciencias Forenses de Colombia, se pudo concluir que “la mayoría de las heridas de bala descritas son consistentes con que hayan sido infligidas con intención de matar”.
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