Tragedia en Antioquia: una joven muerta y otra desaparecida tras caer al embalse de El Peñol por una gorra

Los hechos ocurrieron en horas de la tarde de este miércoles, las mujeres, en una moto acuática, ingresaron al embalse sin chalecos salvavidas para rescatar la prenda, que se le había caido a una de ellas

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Según el Departamento Administrativo de Gestión del Riesgo de Antioquia, Dagran, se reportó un accidente en una moto acuática en el embalse de El Peñol. Según señala, el departamento de bomberos confirmó que una persona falleció y otra sigue siendo buscada con la ayuda de inmersiones con buzos.

Las autoridades señalan que un grupo de amigos departía en la represa, algunos decidieron tomar unos Jet Sky y durante el recorrido a una de las tripulantes se le cayó una gorra, por lo que intentaron recuperarla, pero en ese momento la moto acuática se volteó.

Tras el incidente, los cuerpos de emergencia lograron recuperar a una de las mujeres que, minutos después, falleció en la Marina Náutica. La otra joven sigue desaparecida, según los bomberos, creen que el cuerpo está sumergido en el embalse, por el sector de la vereda La Palestina.

Martha María Vergar, comandante de Bomberos del Peñol, en dialogo con Telemedellin dijo que como no se sabe el sitio exacto, donde está la mujer desaparecida, es muy complicado realizar la búsqueda. Añadió, que ya se hicieron 2 inmersiones y hoy se reanudarán las labores con buzos del cuerpo de bomberos de Guatapé, Marinilla, El Peñol y Rionegro.

Stefany Garzón de 27 años fue la joven rescatada y que minutos después se confirma su deceso; Saray Narváez Granada de 23 años, es quien aún se encuentra desaparecida. Llama la atención, según las autoridades, que ninguna de las personas que estaba en las motos, ni la mujer fallecida, portaban chalecos salvavidas. Aseguran, que solo 2 de los acompañantes sabían nadar.

La comandante Vergara dijo: “Dos de ellas no sabían nadar (…), una de ellas perdió la vida en el embalse, la otra fue rescatada por la joven que sí sabía nadar y no se les brindó ninguna atención al instante”, aseguró que las víctimas venían de vacaciones desde Medellín, por lo que habrían alquilado una finca en El Peñol, junto con sus amigos. Es por esto que las autoridades están determinando, si la moto acuática es propiedad de alguno de ellos, o, es un vehículo alquilado de alguna de las empresas que presta el servicio en el embalse.

Las condiciones de seguridad de la represa, según versiones oficiales, cuentan con la Inspección Fluvial, dependencia directa del Ministerio de Transporte y vigilancia de la Policía Nacional con el barco Renacer, el cual hace patrullaje dentro del embalse.

Según El Colombiano, hasta agosto pasado, se encontraban registradas 250 embarcaciones y 31 empresas náuticas, habilitadas para brindar servicios en El Peñol. Pero, el número de ciudadanos que compra su lancha personal de recreo sigue aumentando, esto genera el riesgo de tener capitanes sin la pericia suficiente para navegar.

Estos hechos ya habían sido reseñados por la comandante Vergara el año pasado, cuando recriminó el uso irresponsable de lanchas, embarcaciones pequeñas y Jet Sky. En ese momento aseguró, que la situación se estaría saliendo de las manos, pues los operadores encargados de administrar el transporte acuático al interior de la represa, no están haciendo los controles necesarios para la circulación de embarcaciones, al igual que para el alquiler de aparatos como motos acuáticas.

Señaló que “personas inescrupulosas” y sin conocimiento del manejo de estas embarcaciones, serían los presuntos responsables de varios incidentes ocurridos en los años 2020 y 2021, algunos de gravedad, donde incluso, menores de edad han sido sorprendidos operando estos elementos.

En el embalse reclaman por una promesa del Ministerio de Transporte, que nunca se cumplió. Se trataba de crear una “Capitanía de Puerto”, que según el decreto de Ley 2324 de 1984, en los artículos 19 y 20, además en la Ley 1561 de 2002, señala que la Dirección General Marítima, Dimar, cuenta con dependencias regionales y seccionales denominadas Capitanías de Puerto, en los puertos marítimos y fluviales de su jurisdicción, las cuales ejercerán las funciones de la entidad en el área asignada, de acuerdo con la ley y los reglamentos.

La idea es que estas “Capitanías de Puerto” regulen y vigilen los deportes náuticos, los desplazamientos de los turistas en embarcaciones y a los vehículos acuáticos propios de visitantes y/o dueños de predios aledaños al embalse.

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