El presidente de la República, Iván Duque, visitó el departamento del Magdalena, este miércoles 6 de abril a fin de presentar el Proyecto de Autogeneración con la Comunidades Indígenas de la Sierra Nevada de Santa Marta, donde confirmó “el éxito de la unión fraterna y decidida entre el Estado, la empresa privada y los pueblos ancestrales, con el objetivo común de generar bienestar para los colombianos”.
Se trata de la propuesta Terra de GreenWood Energy, que según precisó el Gobierno nacional, se suma a su objetivo de la transición energética. Del mismo modo, precisó que el proyecto tendrá una capacidad total de 144 megavatios divididos en seis plantas, y que reducirá 1,18 millones de toneladas de CO2 durante los primeros 35 años de operación.
La información también detalló que la inversión es de USD 120 millones y se gestionarán en tres fases, durante las cuales se desarrollará la construcción de los parques y beneficiará a 1,5 millones de personas en toda la región caribeña.
De acuerdo con el jefe de Estado, con el proyecto se demuestra “que las comunidades ancestrales de nuestro país están también comprometidas con la transición energética. Una transición que se debe hacer en una alianza fraterna entre las empresas, el Estado y las comunidades”.
Le puede interesar: OCDE dio su respaldo a la política comercial de Colombia
“GreenWood Energy, después de tres años de diálogo constante, de construir confianza, de decirles a las comunidades que no solamente deben ser promotoras sino socias de estos proyectos, hoy hizo el lanzamiento oficial de la iniciativa Terra, que se podrá conectar a la red eléctrica del país, generar empleo y llevar esta nueva tecnología a una región bendecida por un sol canicular, que es el símbolo de la luminosidad ancestral de nuestras comunidades ancestrales”, precisó el presidente Duque.
Asimismo, detalló que la primera línea del proyecto, que será de más de 11,5 kilómetros, tendrá al mismo tiempo una inversión en protección de cerca de 119 mil hectáreas, uniendo los conceptos de la conectividad de la energía y la protección del patrimonio ambiental.
“Le va a permitir a la comunidad beneficiarse con la construcción de tres nuevos centros poblados que respetan la ancestralidad, que recogen la ancestralidad y que permitirán también darla a conocer al mundo”, manifestó.
Agregó que cada vez que visita Nabusimake (lugar donde presentó el proyecto) “sale cargado de buena energía, de buenos propósitos y demostrándole al mundo que en Colombia sí es posible que con iniciativas de libertad económica se pueden construir proyectos como este, donde las comunidades indígenas son socias, promotoras y al mismo tiempo beneficiarias. Esa es la mejor respuesta al populismo, al estatismo a la demagogia, que muchas veces trata de enfrentar la ancestralidad con la sociedad; error, craso error”.
Finalizó su intervención señalando que, “este proyecto es un ejemplo para el país y para el mundo, porque si las comunidades indígenas de Colombia se convierten en los defensores de esta transición energética, serán también quienes les enseñarán a las nuevas generaciones, dentro de la misma comunidad, que esa energía del sol y esa confluencia con la ‘Madre Tierra’, y en particular ésta, privilegiada, que tiene todos los microclimas y que llega a los puntos más altos de nuestra geografía, evidencia la riqueza natural que ha bendecido a Colombia”.
SEGUIR LEYENDO: