Este 6 de abril se dio a conocer un nuevo caso de abuso sexual al interior de un hospital. De cuerdo con medios de comunicación nacionales un auxiliar de enfermería identificado como Jorge Enrique Pérez Castro adscrito a la unidad de Salud Mental del Hospital La Victoria, que se encuentra ubicado en la localidad de San Cristóbal, al sur de Bogotá, habría abusado de al menos 17 pacientes psiquiátricas y habría sido descubierto por una trabajadora del establecimiento de salud.
Tras salir el escándalo que ha puesto en apuro a las directivas de La Victoria, El Tiempo dio a conocer que Pérez era conocido por su comportamiento extraño y había sido denunciado en múltiples ocasiones por sus compañeros, incluso, desde hace un buen tiempo atrás. Lo preocupante en este caso es que bajo la excusa de no haber suficiente personal lo dejaron sin importar las banderas rojas y sin haber indagado.
“Hace un año se había denunciado esa situación. No puedo creer que por encima del abuso hacia una mujer se sobreponga que se necesita personal”, dijo un empleado al medio colombiano, quién se encuentra sorprendido pues al momento de indagar unas 17 víctimas, entre esas menores de edad, señalaron al auxiliar de enfermería de haber aprovechado su puesto para abusarlas, aprovechando su nivel de sedación por los medicamentos que se usan para tratar este tipo de enfermedades.
Ante la delicada situación, la Secretaría de Salud abrió una investigación y decidió de forma temporal hacer el cierre de la unidad psiquiátrica en el Hospital la Victoria, cabe aclarar que los pacientes fueron reubicados en otros centro de Bogotá.
“Producto de las visitas de verificación practicadas y ante la evidencia de riesgo en talento humano y procesos prioritarios, el día 5 de abril se impuso medida de seguridad consistente en cierre temporal y preventivo del servicio de hospitalización mental de la unidad de servicios de salud La Victoria”, puntualizó el ente y agregó: “En relación con los presuntos hechos punibles que se haya podido cometer, serán las autoridades judiciales las encargadas del esclarecimiento y la imposición de las correspondientes sanciones. Igualmente, corresponde a los tribunales de ética adelantar las actuaciones relacionadas con las presuntas fallas ético-profesionales del personal de salud que pueda resultar involucrado”.
La situación fue dada a conocer por una enfermera jefe que lo encontró escondido de tras de la puerta de una de las habitaciones en su hora de descanso, luego de que una paciente gritara: “El viernes en la noche encontraron a uno de los enfermeros en una habitación con cuatro pacientes, una de ellas estaba inmovilizada de pies y manos. Él (Pérez Castro) supuestamente estaba en su hora de descanso, cuando escucharon gritar a una de las pacientes, la enfermera jefe llegó y encontró al enfermero escondido detrás de la puerta, otra de las pacientes dijo que él le estaba haciendo sexo oral y cuando le levantaron la cobija, la mujer tenía la ropa interior bajo las rodillas y estaba más sedada de lo normal, no podía articular palabra”, relató Susana Vélez una trabajara del hospital a RCN Radio.
Lo más grave de la situación el que Pérez Castro al enterarse de los procesos legales en su contra emprendió la huida y hasta el momento no hay rastro de él.
“Llegó a turno como si nada hubiera pasado, y no lo dejaron entrar, él dijo que no le habían podido demostrar nada y que él iba a seguir con su vida normal. Pero el celador le dijo que el tenía una orden de captura y que lo estaban buscando, en ese momento él dijo “ah me están buscando, ah bueno gracias”, se fue del hospital y desapareció”, relató la mujer a RCN Radio.
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