Estas son algunas de las pistas que tienen las autoridades sobre el atentado del CAI de Ciudad Bolívar

El pasado 26 de marzo se presentó un atentado en el CAI de Arborizadora Alta, en la localidad de Ciudad Bolívar. El dramático hecho que fue ejecutado por las disidencias de las Farc, dejó como saldo 35 personas lesionadas y un niño de 12 años y una niña de cinco años fallecidos. La explosión también dejó al menos 20 casas afectadas, cuyas ventanas se rompieron por la fuerza de la onda explosiva, así como seis mascotas heridas.

El hecho ha marcado un precedente y una alerta importante en la capital de Colombia, pues deja al descubierto que ni siquiera las zonas urbanas están exentas de la violencia de los grupos criminales que se han consolidado en el país. En las investigaciones se ha señalado que el acto terrorista fue financiado y planeado en Venezuela, además que, se le atribuye a Javier Alonso Velosa García alias John Mechas, jefe criminal de una de las disidencias de la extinta guerrilla de las Farc y son el mismo grupo armada que ejecutó el atentado en contra del presidente Iván Duque y contra el aeropuerto de Cúcuta (Norte de Santander).

Sin embargo, lo anterior solo sería la punta del iceberg, pues de acuerdo con El Tiempo, esta es una pista más de un hecho terrorista de alto impacto podía presentarse en Bogotá y este hecho solo sería uno de los pasos de los criminales para dar un golpe en la capital antes de que se defina el ganador de las elecciones presidenciales 2022.

Pero esto no sería nuevo, pues semanas antes se habrían incautado en una vivienda y en vías de Bogotá toneladas de explosivos que serían usadas para atentados terroristas como la explosión en la localidad de Ciudad Bolívar. Sumado a esto, la Defensoría del Pueblo aclaró que ya había hecho cinco alertas relacionadas con esta situación que pone en riesgo la seguridad de la ciudad.

El medio colombiano entrevistó a Juan Sebastián Jiménez, sociólogo y politólogo experto en seguridad de la Universidad Nacional, quien aseguró que todos estos hechos pueden tener relación con un conflicto por el dominio de la localidad, que podría ser una ruta fundamental para rutas de narcotráfico.

“Se está generando un conflicto por el control de un cinturón específico de la ciudad que abarca a Ciudad Bolívar y Usme, y que involucra la posibilidad de tránsito clave para la economía ilegal (armas y drogas) a través del corredor que conecta a Sumapaz y Sibaté”, puntualizó el experto.

Por su parte, Luis Felipe Vega, experto en seguridad y geopolítica de la Universidad de Leipzig, Alemania agregó que la situación es más compleja de lo que parece y que se debe avanzar no solo en la búsqueda de un cabecilla, sino en la forma de hacerle frente a un grupo armado que quiere traer el conflicto armado a las urbes.

“Lo particular de la amenaza que está creciendo en Bogotá, es que se está cumpliendo la premisa del ‘Mono Jojoy’ de llevar la guerra a las ciudades”, anotó Luis Felipe Vega y agregó que las autoridades “deben tener información de inteligencia sobre la gravedad del asunto. Esto no se trata de ir detrás de un hombre que puso una bomba, es un grupo armado que quiere mostrar su fuerza en Bogotá”.

Por ahora las autoridades trabajan de la mano con diferentes instituciones para avanzar en la investigación: “Hemos acordado todo el apoyo de la Fiscalía General de la Nación, para que podamos hacer toda la investigación y judicialización de manera expresa, y que podamos también actuar frente a 36 estructuras criminales en la ciudad de Bogotá, que pueden estar involucradas en hechos de subcontratación criminal o qué son amenazas permanentes para la ciudadanía”, anunció el general Jorge Luis Vargas, el director de la Policía Nacional de Colombia.

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