En las últimas horas, el Tribunal Superior de Bogotá acptó el preacuerdo que el exfiscal Fabio Martínez Lugo hizo con la Fiscalía en el caso por el escándalo de las chuzadas telefónicas en el que estuvo implicado el exfuncinario. Con este preacuerdo Martínez será condenado a siete años de cárcel.
Cabe recordar que en este caso el exfiscal 32 de la Dirección Contra las Organizaciones Criminales fue imputado por el ente investigador por los delitos de prevaricato por acción, violación ilícita de comunicaciones, fraude procesal y concierto para delinquir.
Como parte del preacuerdo, el exfiscal Martínez tuvo que aceptar su responsabilidad en el caso de las interceptaciones ilegales realizadas por funcionarios de la Fiscalía y, además, pidió perdón a la comunidad por los daños causados.
“Pido perdón a la sociedad colombiana y sobre todo a las víctimas, a ustedes señores magistrados del Tribunal y a mi familia por mi comportamiento, porque con él traicioné y defraudé la confianza que fue consignada en mí para el cumplimiento de la función de mi cargo”, expresó el exfiscal.
También expresó que “con mi aceptación de cargos, la justicia colombiana demostró que alejarse de la legalidad, aun para funcionarios encargados de la investigación criminal, tiene consecuencias penales. Por ello, mi proceso debe ser tema de reflexión para todos los funcionarios judiciales e investigadores sobre las consecuencias de salir del límite de la ley”.
En la audiencia ante los magistrados del Tribunal el exfiscal Martínez reconoció su responsabilida detrás del escándalo de las chuzadas. Cabe recordar que, desde 2019, año en el que miembros del CTI capturaron a Fabio Martínez Lugo por este hecho, el caso en su contra ha ido avanzando y, en la actualidad, el hombre logró una condena de siete años con un preacuerdo con la Fiscalía.
Sin embargo, algunas fuentes del caso confirmaron a la W Radio que el exfiscal Martínez podría reducir su condena hasta a tres años y, por ende, podría recuperar su libertad en unos meses. Esto lo lograría con buena conducta y algunos beneficios, a pesar de que la Fiscalía haya pedido la pena máxima de 92 meses en centro carcelario.
En este caso la Fiscalí d¿solo podía hacer un preacuerdo simple con el procesado, es decir, que renunciara voluntariamente a su presunción de inocencia, a cambio de una rebaja de pena equivalente a la tercera parte de la sanción posible. Sin embargo, Martínez Lugo señaló que su aceptación de cargos no se debe a una rebaja de pena, sino a un “verdadero arrepentimiento”.
“Mi arrepentimiento es total. Por eso le pido a Dios que ilumine a las nuevas generaciones de funcionarios judiciales y en la Fiscalía”, concluyó Martínez en medio de la audiencia.
Antecedentes del caso en contra del exfiscal Fabio Martínez por escándalo de las chuzadas
La Fiscalía estableció en 2019 que Martínez Lugo fue el funcionario de la Fiscalía encargado de compartir todas las instrucciones al coronel retirado Jorge Humberto Salinas Muñoz para que pudieran interceptar de manera ilegal, y con herramientas de la Fiscalía, las líneas telefónicas de la Asociación Colombiana de Aviadores Civiles (Acdac) y del presidente para Latinoamérica del Grupo Enel – Codensa.
En la investigación de la entidad son claves las fechas entre el 18 de diciembre de 2017 y el 16 de enero de 2018, cuando Martínez Lugo fungía como fiscal 32 de la Dirección Contra las Organizaciones Criminales, puesto que en este periodo de tiempo el exfuncionario ‘chuzó' los abonados telefónicos pertenecientes a varios miembros de la Asociación Colombiana de Aviadores Civiles como el capitán Julián Pinzón.
Y entre el 25 de junio al 14 de agosto de 2018 el exfiscal también interceptó ilícitamente los teléfonos de Felipe Jaramillo Londoño y Jorge Flores, quienes también fueron víctimas del caso. En 2019, la Fiscalía le imputó estos cargos a Martínez Lugo, pero este no había aceptado cargos, a pesar de que fue acusado por Luis Carlos Gómez Góngora, antes coordinador de la Sala Diamante de la Fiscalía.
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