La Policía Metropolitana de Bogotá convocó una velatón este domingo a la que asistieron más de 400 personas para rendirle homenaje a Daniel Estiven Duque Buitrago, el menor de 12 años que falleció por la detonación del CAI Arborizadora Alta en Ciudad Bolívar, al sur de Bogotá.
Vecinos, familiares de los heridos y la ciudadanía en general se reunió con carteles, velas y globos blancos, rechazando la violencia. Las actividades fueron las siguientes: a las 6:00 de la tarde hicieron la velatón, a las 7:00 de la noche hubo una eucaristía y a las 7:33 realizaron un minuto de silencio por la muerte del menor.
Al evento asistió Wilmer Duque, padre del niño, quien le comentó a La FM cómo era Daniel Estiven. Según el acudiente, el menor era “excelente” tanto en la comunidad como en los estudios. “Desgraciadamente, por esta banda delincuencial que hay, ha perdido la vida mi hijo”, afirmó el hombre y le pidió a las autoridades que encuentren a los responsables del atentado. “Yo les digo a los que hacen estos actos violentos que se compadezcan con los demás — explicó ante el medio de comunicación —. Destruyen hogares y familias. Por favor cesen la violencia”.
Por su parte, Gloria Buitrago, la madre de Daniel Estiven, habló ante Noticias Caracol y explicó por qué el niño perdió la vida en el atentado. “Esta guerra que estamos viviendo siempre sacrifica a los más inocentes (...) El niño estaba haciendo un mandado y desafortunadamente quedaba al frente de todo el CAI”.
Con respecto al lugar de la detonación, el mayor general de la Policía Metropolitana de Bogotá (Mebog), Eliécer Camacho, afirmó que por las afectaciones el CAI deberá ser demolido y reconstruido. El uniformado le propuso a la comunidad que el nuevo centro lleve el nombre de Daniel Estiven Duque.
A su vez, la alcaldesa Claudia López informó que se llevará un CAI Móvil a la zona, por instrucciones del presidente Iván Duque, y que habrá 160 Policías más en la localidad para reforzar la seguridad.
Lo que se sabe del atentado
La explosión se registró en horas de la noche del pasado sábado 26 de marzo. De acuerdo con el reporte de las IPS, fueron atendidas 35 personas, 33 civiles y dos policías, de los cuales 17 no se encuentran hospitalizados. Los otros 17 requirieron atención médica adicional; de ellos, 11 fueron egresados y 6 siguen en los centros médicos, de los cuales se destaca Diana Salome Rangel, quien fue trasladada al Hospital de Meissen, presenta una afectación en su masa cerebral.
Por otro lado, 66 casas resultaron afectadas por la onda explosiva que rompió todas las ventanas. El Instituto Distrital de Gestión de Riesgos y Cambio Climático (Idiger) ha entregado 600 metros de plástico para cubrir provisionalmente las ventanas de las viviendas junto con 30 kits de alimentos.
“Las primeras investigaciones que ha adelantado nuestra Policía indican que quien puso ese artefacto y lo detonó, lo hizo a sabiendas de todo el entorno, viendo que había comunidad, que había familias, que había niños. Ese es un acto criminal que condenamos y que rechazamos”, dijo la alcaldesa Claudia López.
Asimismo, reiteró su condena al ataque perpetrado. “Quien detonó el artefacto sabía el daño que hacía. Este es un acto criminal”, afirmó. También recordó que, “por instrucción del Presidente de la República, se elevó a 300 millones de pesos la recompensa” por información que permita dar con los responsables de este hecho.
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