Adriana “La Biopo” Díaz era la mujer, de nacionalidad venezolana, que, luego de una discusión con un grupo de taxistas, fue brutalmente atacada por tres de ellos. La gravedad de los golpes recibidos le ocasionó la muerte a Adriana. Los hechos se registraron en el sector Ricaurte, en el suroccidente de Tunja.
Lizeth Nathalia Franco Reyes, directora de la seccional de Fiscalías de Boyacá, señaló que el próximo 19 de abril se adelantará la audiencia de imputación de cargos por el delito de tortura contra los tres taxistas que habrían participado en la golpiza, en la madrugada del 28 de junio del 2021.
La investigación preliminar, arrojó que la mujer trans fue asesinada con un arma contundente luego de que uno de los conductores pidiera ayuda a otros taxistas, porque, presuntamente, Adriana lo habría robado.
Pero, el Instituto Nacional de Medicina Legal logró establecer en los hallazgos de la autopsia, que el asesinato se desencadenó no por los golpes, sino por la correlación entre la situación de estrés y el consumo de cocaína. “Se permitió orientar una causa de muerte asociada a una alteración cardiovascular como la arritmia cardíaca”.
“Desde el momento que ocurrió el hecho, se adelantaron entrevistas, inspecciones, declaraciones, recolección de videos, requerimientos a Medicina Legal y solicitud de audiencia desde el mes de noviembre para vincular a los tres taxistas”, señaló la directora Lizeth Franco. Agregó, que los tres taxistas vinculados al proceso de indagación se encuentran en libertad y están notificados para asistir a la audiencia de imputación de cargos.
Un video publicado por la Fundación GAAT (Grupo de Acción y Apoyo Trans), muestra la brutalidad de los ataques por un grupo de más de tres conductores, que contaban con la presencia de la Policía Nacional. La Fundación aseguró, en su cuenta de Twitter, que Adriana no fue atendida en el centro hospitalario por ser una persona migrante.
Según la ONG Colombia Diversa, entre los años 2019 y 2020, en Colombia 448 personas de la comunidad LGBTI fueron victimas de actos de violencia. El análisis muestra factores como el hacinamiento crítico y la insatisfacción de necesidades básicas, como lo que aumenta el riesgo de violencia contra los integrantes de dicha comunidad.
“El informe también presenta cifras frente líderes y lideresas sociales LGBT, teniendo como resultado que 139 defensoras de derechos humanos fueron atacadas en 22 departamentos del país entre 2017 y 2020; de los cuales el 84% corresponden a amenazas y hostigamientos, más del 10% a homicidios y el resto a agresiones por parte de agentes de la Policía Nacional”
,asegura Colombia Diversa.
Sin Violencia LGTBI, es una entidad que reúne a organizaciones de derechos humanos de once países del continente americano, la cual alertó sobre esta “violencia imparable e incomprensible”. Entre los años 2014 y 2020 asesinaron a 3514 personas de la comunidad. El 87% de estos hechos ocurrieron en Colombia, México y Honduras.
La Dirección de Desarrollo Social, Subdirección de Género, publicó un informe sobre la situación de la población trans en Colombia,
“Aunque existen normas que establecen una protección especial a las personas trans, persisten situaciones de discriminación en los diferentes contextos en que se desenvuelven. Estas situaciones se encuentran en los contextos de institucionalidad, social y político, de la familia, educativo, laboral y de la salud”
, concluyó el análisis.
También asegura que las personas trans sienten discriminación en su vida cotidiana, desde el momento en que salen de sus casas o en situaciones rutinarias, por ejemplo: cuando van al colegio, al médico o salen a la calle. Esta población se siente maltratada, irrespetada e insegura.
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