Así se está luchando contra la deforestación en Colombia, de acuerdo con la Contraloría

El ente de control advirtió los riesgos de esta problemática en el medio ambiente del país

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La mayoría de territorio deforestado se encuentra en la Amazonía colombia. Foto: Rodrigo Botero - Fundación para la Conservación y el Desarrollo Sostenible (FCDS)
La mayoría de territorio deforestado se encuentra en la Amazonía colombia. Foto: Rodrigo Botero - Fundación para la Conservación y el Desarrollo Sostenible (FCDS)

Este lunes 22 de febrero, la Contraloría General de la República advirtió sobre la grave situación a que ha llegado la deforestación en Colombia y consideró urgente “detener esta masacre ambiental, que se traduce en que cada año son taladas alrededor de 170 mil hectáreas de bosque en promedio”.

De acuerdo con el contralor delegado para el Medio Ambiente, Gabriel Jurado, diariamente se talan 500 hectáreas de bosque en Colombia.

Hace 30 años, en el año 1990, Colombia tenía algo así como 65 millones de hectáreas de bosques. Hoy esa cantidad está por el orden de 59 millones. Es decir, hemos perdido en 30 años más de 5 millones de bosque.

El ente de control considera que esta situación es “muy grave”, pues está rompiendo con los ciclos de conectividad biótica de todos estos ecosistemas y, por consiguiente, se está generando un daño irreparable en el medio ambiente.

“El tema del cambio climático nos está golpeando y cerca del 60 por ciento de las emisiones de CO2 que se emiten en el país son producto de estos procesos de deforestación, particularmente por las quemas que se están haciendo”, enfatizó el Delegado de Medio Ambiente.

Por esta razón, y a través del ejercicio del control concomitante y preventivo, la Contraloría General de la República realiza un seguimiento permanente al funcionamiento, tareas y actividades que desarrolla el Consejo Nacional de Lucha contra la Deforestación (Conaldef).

De acuerdo con la meta establecida en el Plan Nacional de Desarrollo “Pacto por Colombia, Pacto por la Equidad”, a 2022 se plantea la reducción de la deforestación en un 30% con respecto al escenario actual y la CGR le tiene puesta la lupa al cumplimiento de dicho objetivo y a que ese avance se respalde y evidencie con cifras claras y concretas.

Dentro de sus actividades de seguimiento, la Contraloría recolecta y analiza información sobre la situación de la deforestación en Colombia, contando para ello con el reporte oficial de deforestación del IDEAM (años 2018 a 2020), evaluando igualmente las alertas emitidas por esta entidad durante el mismo período de tiempo.

En el ojo del organismo de control están también las actuaciones desarrolladas por las autoridades ambientales y, en general, los resultados en términos de disminución del fenómeno e inversión de recursos financieros.

En Colombia, el 65% de la deforestación se encuentra concentrada en la Amazonía Colombiana. La CGR ha evaluado en años anteriores el cumplimiento de las obligaciones relacionadas con el control de la deforestación en dicha zona por parte del Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible, las Corporaciones Autónomas que tienen jurisdicción en la región y Parques Nacionales Naturales de Colombia.

Algunas situaciones que puso en evidencia la auditoría al respecto (liberada en 2020), son la siguientes:

Los planes y políticas nacionales no se llegan a implementar completamente, o se ponen en práctica de forma tardía. O, igualmente, no avanzan en la forma que se prevé o se requiere.

Se advierte una baja asignación de recursos por parte del Estado y mayor presencia de la financiación de la cooperación internacional, generando debilidad en las fuentes de financiamiento.

Así mismo, se evidenciaron debilidades en materia de gestión y control de permisos de aprovechamiento forestal que otorgan las autoridades ambientales.

Alerta por deforestación en el Chocó

Y un informe de una auditoría más reciente de la Contraloría (de Cumplimiento), sobre la deforestación en el Chocó deja ver debilidades en el control, vigilancia y seguimiento de la movilización de los recursos forestales maderables explotados en este departamento.

También se encontraron deficiencias en el procedimiento o trámite de expedición de permisos de aprovechamiento forestal, otorgados por esta misma Corporación en las vigencias 2018, 2019 y 2020. Y se advierten debilidades en el desarrollo de los procesos sancionatorios ambientales, relacionados con la deforestación en el Chocó.

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