El evento musical de carácter masivo, esperaba que llegaran alrededor de 8.000 personas desde Europa y al menos 5.000 desde Estados Unidos, además de otra cantidad significativa de otros países de Latinoamérica. Sin embargo, para todos ellos también ha sido una sorpresa la noticia del aplazamiento ya que a pocas horas del evento parecía una realidad.
Incluso, algunos ya habían llegado a Colombia y a la ciudad de Ibagué en donde se iba a realizar el Jamming Festival contando con artistas, comerciantes y demás asistentes de diferentes partes del país. Ante esto la organización guardó silencio y solo hasta altas horas de la noche del viernes dieron a conocer las razones por las que decidieron detener la realización del concierto que duraría tres días.
En medio de la complicada situación el evento no parece tener un derrotero marcado de cara a realizarse, pues en el comunicado finalmente se dieron dos alternativas para las personas que habían comprado las boletas. Por un lado podrán asistir a otro evento organizado por Buena Vibra Eventos E.U tales como el de los Enanitos Verdes o Vicentico, según indicaron, o bien hacer pedido de reembolso del dinero.
Las personas afectadas tendrán un plazo máximo de tomar una decisión con relación a esto, según el informe, hasta el próximo 30 de marzo de 2022.
Mientras tanto la indignación de la gente llevó a que se tomarán medidas de hecho contra el bar Casa Babylon, en donde varias personas entraron y saquearon el lugar a modo de protesta contra los dueños y organizadores del Jamming.
Entre tanto, el medio de comunicación local El Nuevo Día, entrevistó a la que fuera hasta hace unas horas la jefe de prensa del evento, Consuelo Restrepo, pues comentó que también estaba sorprendida por lo acontecido y ante la nula comunicación que hubo incluso con ella por parte de los directivos, decidió renunciar. Esto dijo:
“Me desligué del Jamming Festival (…) estamos organizando grupos de ayuda para quienes lo puedan necesitar”, indicó Restrepo.
Asimismo, quiso ir más allá y dar detalles de cómo han pasado las cosas sin ni siquiera ser informada de alguna anomalía acerca del concierto mientras se edificaba todo dentro de Playa Hawai, locación destinada para el Jamming:
“No he tenido respuesta, de todos los mensajes que hago, de todos los mensajes que he enviado desde las 4 de la mañana, no consigo ningún contacto, la verdad para todos fue incierto porque las inversiones, cuando trabajaba ahí vi en tarima, la decoración, todo hecho (…) ad portas del festival personas trabajando 24 horas, con lluvia con sol, para todos era una realidad”.
En el mismo intento por comunicarse con los directivos del Jamming, la periodista de El Nuevo Día logró contactar a la abogada de la compañía Buena Vibra Eventos E.U, Andrea Casallas, la cual luego de decir que iban a brindar un comunicado, el de la noche, colgando enseguida de manera repentina sin dar más declaraciones al respecto.
Habrá que esperar qué sucede en los próximos días y si finalmente la Superintendencia de Industria y Comercio, la cual ya envió un comunicado en donde expresa que hacen seguimiento a la organización de este evento.
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