En el corregimiento de Aguada de Pablo, jurisdicción del municipio de Sabanalarga, Atlántico, se presentó una protesta debido a la molestia de la comunidad por el incumplimiento de las promesas políticas de años anteriores. Ante la situación, dos periodistas de El Heraldo fueron atacados mientras hacían el cubrimiento de los hechos.
Los reporteros terminaron heridos debido a los enfrentamientos que se presentaron después del mediodía entre la comunidad y el Escuadrón Móvil Antidisturbios (Esmad). Los habitantes del corregimiento reaccionaron lanzando piedras y otros objetos contundentes; mientras que los uniformados intentaban salvaguardar el derecho al voto de los ciudadanos. Asimismo, los hombres que atacaron directamente a los periodistas les manifestaron que la casa editorial a la que trabajaban era “propiedad de uno de los candidatos en contienda”, lo cual fue negado por parte de El Heraldo.
Johnny Olivares, reportero gráfico del medio de comunicación y afectado durante los disturbios, contó ante su casa editorial que cuando llegaron al corregimiento la comunidad estaba impidiendo que las votaciones se llevaran a cabo. Los periodistas trataron de entrevistar a los ciudadanos sobre la situación; sin embargo, terminaron rodeados por un grupo de personas que le exigían la entrega de su equipo fotográfico.
El reportero aseguró que lo golperaron, le quitaron los lentes y terminó herido en la pierna izquierda. “Eran tantas personas que no supe con qué me hirieron — explicó Olivares —. Me pegaron en la cara de tal forma que quitaron los anteojos y se llevaron la cámara”. Después de 10 minutos, uno de los manifestantes le devolvió el equipo fotográfico con el lente partido y le ofreció disculpas por el incidente.
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El periodista también narró la situación ante Blu Radio. En este medio aseguró que fueron al menos 10 hombres los que le dieron unas patadas y, al lograr salir de la turba, se refugió en una casa de un habitante del sector.
Por su parte, Jesús Alarcón, redactor de la sección de Locales y también afectado en la manifestación, brindó su testimonio en El Heraldo y aseguró que la turba se lanzó contra ellas después de intentar entrevistar a un ciudadano. “Ellos me gritaban que nos fuéramos, que tuviéramos cuidado con los objetos personales. Que no nos querían en el pueblo porque éramos periodistas; que no querían a periodistas de este medio cerca”, agregó el reportero.
La manifestación en Aguada de Pablo
Según informó Blu Radio, la protesta inició porque un gran número de ciudadanos decidió hacer un plantón en la entrada del único puesto de votación del corregimiento, el cual tenía habilitadas a 3.000 personas aproximadamente para participar. Sin embargo, un grupo pequeño de personas insistió en su derecho de votar en las elecciones al Congreso, lo que conllevo a la alteración del orden público.
“La comunidad se siente ultrajada y maltratada por parte del estado y dicen que la única forma de poderse defender es con palo y gasolina ante la fuerza que trae la autoridad nacional”, puntualizó Nibier Berdugo, uno de los líderes de la manifestación, ante el medio radial.
La gobernadora del Atlántico, Elsa Noguera, le aseguró a El Heraldo que las autoridades estaban tratando de tener una conversación con los manifestantes. “No se pueden quedar los ciudadanos sin ejercer su derecho al voto — aseveró la funcionaria —. Esperamos que por el diálogo se pueda persuadir a los manifestantes y permitir que todos voten”. Las autoridades señalaron que capturaron a tres personas que participaron en los desmanes.
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