Ingrid Betancourt le pidió a Piedad Córdoba que renuncie a su candidatura al Senado

Pese a que la exsenadora aceptó la solicitud de Gustavo Petro de ser investigada por el comité de ética de Pacto Histórico por el escándalo en el proceso de liberación de secuestrados por las Farc, la candidata a la Presidencia cree que Córdoba debe hacerse a un lado hasta que aclare su situación

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Piedad Córdoba e Ingrid Betancourt
Piedad Córdoba e Ingrid Betancourt

En el debate del Pacto Histórico realizado por El Tiempo y Semana, el precandidato presidencial y líder del Pacto Histórico, Gustavo Petro, se refirió a la situación por la que es investigada la exsenadora Piedad Córdoba y en su intervención, además de aceptar que su entrada a la coalición haya sido su responsabilidad, pidió al Comité de Ética de la coalición que se abriera una investigada y así esclarecer los hechos por los que ha sido acusada, tanto en relación con los dinero de Alex Saab como con las acusaciones que la inmiscuyen con los secuestros de las extintas Farc.

Ante el pronunciamiento y la petición del candidato, la exsenadora y actual aspirante al senado aceptó y trino: “Acepto solicitud de Gustavo Petro de activar mecanismos internos de Pacto Histórico para esclarecer las acusaciones en mi contra. En debido proceso demostraré al país mi inocencia y los intereses detrás de la persecución política. Pido a medios transmitir sin censura mi comparecencia”.

Sin embargo, para la candidata presidencial de Verde Oxigeno, Ingrid Betancourt no fue suficiente la respuesta de Córdoba y le pidió mediante un mensaje por Twitter que renunciará a su candidatura y aseveró que el actuar de la coalición fu tardío.

“Tarde la reacción del Pacto luego de ser conocidas las graves acusaciones en contra de @piedadcordoba. Lo mínimo que esperamos los colombianos es que renuncie a su candidatura sin atrincherarse en el aforo que le daría su curul de senadora. ¿Pacto con quién?”, escribió la líder del partido alternativo.

Recordemos que Piedad Córdoba es investigada por los supuestos negocios que tuvo con Alex Saab, quien es acusado por Estados Unidos y la Fiscalía colombiana de ser el testaferro de Nicolás Maduro y el régimen venezolano. Las acusaciones se hicieron más fuertes luego de que dos diputados ecuatorianos le hiceran entrega de un documento de 125 páginas al Presidente Iván Duque, a la Fiscalía de la Nación y al Congreso de la República donde existen evidencias de movimientos sospechosos y vuelos privados de políticos que se reunieron con Saab, entre esos, la exsenadora.

Fernando Villavicencio, uno de los voceros de la misión ecuatoriana, criticó fuertemente a la exsenadora y le advirtió sobre la relevancia de los documentos, llegando a afirmar que debería prepararse para que le venía en la justicia. Piedad Córdoba respondió ante las graves acusaciones, aseguró que lo denunciaría y ella misma pidió ser investigada.

Por otro lado, la candidata para el senado de Pacto Histórico, está siendo investigada por su papel como mediadora con las extintas Farc para poder llevar a cabo varias liberaciones entre los años 2006 y 2010, con intereses políticos para ella y para el entonces presidente de Venezuela, Hugo Chávez Frías. Estas acusaciones también fueron realizadas por Andrés Vásquez quien señaló que la candidata al Congreso habría pedido que la liberación de Ingrid Betancourt, quien duró poco más de 10 años secuestrada, no se hiciera pronto.

“Hay diferentes acuerdos entre las tres partes, en donde todos se verían beneficiados, entre ellos que si se entregan los secuestrados a Chávez, Chávez sube la popularidad y ganaba el referendo que venía en diciembre 7 de 2007 y también que catapultó a Piedad con el tema del proceso de paz para ser presidente”, explicó el exasesor en Noticias Caracol.

Con respecto a la declaración ante el Alto Tribunal, en ese momento Betancourt contó cómo fue su cautiverio entre 2002 y 2008. La candidata señaló a los medios de comunicación que, según lo narrado por Vásquez, para ella Piedad Córdoba sí tiene responsabilidad; sin embargo, al ser víctima de secuestro considera que no es un testigo objetivo en el caso.

“Para mí, sí, y hoy más que nunca. Eso lo señaló inteligencia militar en su momento”, comentó ante los medios de comunicación. La exsecuestrada explicó que tenían las pruebas, habían rastreado, cotejado en su momento información; “aquí no hay sombra de duda”, agregó.

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