La Defensoría del Pueblo informó que durante el 2021 los funcionarios de la entidad atendieron 30.000 casos de violencia contra menores de edad en el territorio nacional, razón por la cual hizo un llamado a garantizar los entornos de protección para los niños, niñas y adolescentes frente a los recientes casos de violencia que se presentan en el país.
Así lo anunció el defensor del pueblo, Carlos Camargo, quien detalló que de los casos recibidos durante el año anterior el 34,1 % correspondieron a actos sexuales contra menores de 14 años; el 23,7 % por acceso carnal con menor de 14 años; y el 16,1 % de los casos estuvieron vinculados con inasistencia alimentaria.
“Los recientes casos de abuso, maltrato y matoneo a niños en San Bernardo del Viento, Bogotá, Soacha, Cali, Tuluá y Cúcuta nos conmueven y duelen. Nos conducen también a una reflexión sobre la corresponsabilidad en el cuidado de la niñez, esa indisoluble protección que debe brindar el Estado, la sociedad y por supuesto, la familia, con el propósito de garantizar su desarrollo integral. En ella el Estado debe generar condiciones y entornos en los que la familia pueda ser protectora”, señaló el funcionario.
Los casos que acompaña la entidad
En ese sentido, indicó que actualmente se encuentra haciendo seguimiento a la denuncia de un presunto caso violación por parte de un sacerdote a una menor de edad en el municipio de San Bernardo del Viento, departamento de Córdoba, señalando que a la víctima y a sus familiares se les uso a disposición el acompañamiento, asesoría y representación legal, al tiempo que se requirió atención psicosocial de la EPS y celeridad a las autoridades para que haya justicia.
Asimismo, la Defensoría aseguró que realiza un acompañamiento a las múltiples denuncias de acoso sexual cometidas presuntamente por un profesor del colegio Marymount de Bogotá, que se suman a quejas por matoneo y agresividad contra una estudiante de 13 años, al tiempo que señaló que realiza un acompañamiento a un presunto caso de maltrato infantil contra un menor de tres años que fue cometido presuntamente por la psicóloga encargada de su cuidado en Soacha, Cundinamarca.
“Casos como el de un niño golpeado en un jardín infantil, que una mujer lance a su propio hijo a un río, el matoneo entre estudiantes en un colegio o que se ponga en riesgo físico y mental a niños migrantes nos habla de niveles altos de violencia interpersonal, de problemas de convivencia y de violencia al interior de las familias, y también de algo de indiferencia frente a la niñez”, indicó el funcionario.
De igual manera, indicó que realiza acompañamiento del caso de un menor de seis años que fue lanzado por su mamá al río Cauca que fue rescatada por un ciudadano, así como a los hechos que quedaron registrados en un video en el que un grupo de estudiantes le hacen matoneo a otro alumno con discapacidad visual.
Por último, la entidad señaló que hizo una visita a la situación que viven menores venezolanos en el puente Francisco de Paula Santander, ubicado en la frontera con Ureña, que tienen problemas para desplazarse a sus instituciones educativas, evidenció algunas situaciones que representan riesgos a la integridad física y mental de esta población, razón por la cual se hicieron una serie de recomendaciones para proteger el derecho de los niños, niñas y adolescentes en este sector.
“Desde la Defensoría hacemos un llamado a la responsabilidad de los adultos y profesionales que realizan labores de crianza infantil. Los derechos de los niños, niñas y adolescentes son prevalentes, por eso instamos a las autoridades a ejercer la debida vigilancia y control de los lugares destinados para el cuidado infantil. Esa vigilancia es una garantía de no repetición”, concluyó el defensor Camargo.
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