Gremio de bares y discotecas rechazan autorización de fiestas callejeras en Cali

‘La capital de expresiones espontáneas en el espacio público’, así anunció la alcaldía distrital de Cali para permitir las celebraciones en vías públicas, como las que se presentó el pasado fin de semana en un sector de la capital vallecaucana. Sin embargo, el gremio de bares y discotecas se mostró en desacuerdo ante lo que esto pueda representar.

Se trata de las verbenas, que regularmente se realizan los findes de semana y que habría congregado a más de 300 personas, “empezaron grupos de 15 y 20 personas a escuchar música en el andén y esto fue creciendo a unos puntos ya desmedidos”, aseguró el concejal Roberto Rodríguez.

El horario de la rumba en Cali podría extenderse hasta las 5:00 a.m. a partir del próximo 15 de marzo, sin embargo, para que así suceda, los establecimientos nocturnos tendrán que cumplir con una serie de requisitos.

Dranguest explicó que los lugares deberán acreditarse con el ‘Sello Calidoso’, con el que se ratifica que cumplen con los protocoles de bioseguridad, impulsan la vacunación anticovid y adicional apoyan a los artistas locales.

Además, el subsecretario manifestó que una vez se esté aplicando el nuevo horario se evaluará la posibilidad de que la Administración Municipal contribuya con algunos subsidios, “más adelante podemos inclusive subsidiarles presentaciones artísticas al interior del establecimiento”, indicó.

Por su parte, el gremio de bares y discotecas han rechazado la decisión y mostraron su indignación, manifestando que mientras que los establecimientos legalmente constituidos tienen problemáticas para funcionar, se premie la ilegalidad.

El presidente de Asonoc, Alejandro Vásquez, también manifestó que, “hemos sido un gremio permanentemente atacado, limitado en sus horarios y sus aforos y en la calle se pueden hacer eventos de manera esporádica, por una razón justificada, pero entonces aquí cuando les queda grande el control, todo se vuelve una ‘expresión auténtica’, entonces auténtico es lo que pasa en cada esquina, donde los motociclistas hacen lo que se les viene en gana. Yo creo que ya es hora de decirle a Dranguet que si le quedó grande lo mejor es asumir”.

Con todo esto, ellos piensan que es solo el reflejo de lo que está sucediendo en todos los aspectos en la ciudad y, de ser así, preferirán organizar rumbas callejeras y no acogerse a todos los protocoles, impuestos y condiciones que se les exige en los establecimientos.

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