Sacerdote que habría abusado de una adolescente en Córdoba trató de suicidarse, pero luego se escapó

El cura Carlos José Carvajal Galvis es señalado de abusar, embarazar y hacer abortar a una niña de 13 años en Montería. Es buscado tras huir de un centro médico al que fue remitido después de un fallido intento de suicidio

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El hecho se registró en
El hecho se registró en el municipio de San Bernardo del Viento, luego de que la menor que ayudaba en el templo religioso, fuera llevada a urgencias por un fuerte dolor abdominal . EFE/EPA/FILIPPO VENEZIA

El sacerdote Carlos José Carvajal Galvis, encargado de la iglesia La Inmaculada, en Córdoba, Montería, sindicado por el delito de acceso carnal abusivo con una menor de 13 años, es buscado por la Fiscalía General, mientras profesionales del Instituto de Bienestar Familiar le brindan acompañamiento a la menor.

El hecho se registró en el municipio de San Bernardo del Viento, luego de que la menor que ayudaba en el templo religioso, fuera llevada a urgencias por un fuerte dolor abdominal y tras los exámenes realizados por los médicos, quienes les confirmaron a sus familiares que había sido abusada sexualmente y también que se le había practicado un aborto.

De acuerdo al dictamen de los médicos, la víctima tuvo un “rompimiento de la matriz, lo que le ocasionó un dolor y sangrado constante”, después de haberse realizado el aborto. Al parecer, el abuso de esta joven habría sucedido en 2021, sin embargo, se conoció por el estado de salud que le habría causado la interrupción del embarazo.

Luego de conocerse la historia, las autoridades emitieron orden de captura contra el sacerdote Carlos José Carvajal, quien es buscado tras huir de un centro médico al que fue remitido después de un fallido intento de suicidio.

El cura Carvajal Galvis no es solo es señalado de abusar y embarazar a la adolescente de 13 años, sino que también la habría obligado a abortar, lo que posteriormente le generó a la víctima cólicos y hemorragias que revelaron los abusos a los que era sometida.

Según lo relatado por la víctima a la Fiscalía, fue citada por el sacerdote para entregarle supuestamente, una bata que ella debía usar para cumplir con sus funciones en la iglesia; sin embargo, la emisora W Radio informó que, en medio de la casa cural, Carvajal habría abusado de la menor.

El director regional del Instituto Colombia de Bienestar Familiar (ICBF) en Córdoba, Alberto Jiménez, rechazó lo sucedido y aseguró que la joven junto con su familia recibe el acompañamiento psicosocial que les permita superar este suceso de la mejor manera.

Desde el momento en que el ICBF conoció el caso, un equipo de Defensoría de Familia atendió el requerimiento y verificó los derechos de la niña, a quien se le hizo valoración psicológica inicial, abriendo el respectivo proceso para restablecer sus derechos”, afirmó Jiménez.

Además, sostuvo que desde el Instituto se adelantarán las acciones correspondientes para que sus derechos seas restablecidos y se seguirá brindando acompañamiento a la niña y a su familia.

El ICBF reitera su llamado a las autoridades judiciales para que prioricen los casos de niñas, niños y adolescentes víctimas de violencia, particularmente los delitos sexuales, para disminuir las cifras de impunidad”, puntualizó el directivo.

Diócesis de Montería

A través de un comunicado, la Diócesis de Montería se refirió al caso y se mostró dispuesta a responder a las peticiones de las autoridades de rigor.

Dando respuesta oportuna a los requerimientos de la Fiscalía y a colaborar con la investigación pertinente, se dará inicio a una investigación preliminar tras la emisión de un decreto episcopal y se dictaron medidas cautelares de aportar del ejercicio del Ministerio Sacerdotal al cura señalado de abuso sexual”, indicó la autoridad eclesiástica en el documento.

La Iglesia reconoció que hasta el momento el sacerdote Carlos José Carvajal Galvis no ha podido ser ubicado y se desconoce su paradero.

La Diócesis de Montería reitera su política de buen trato con todas las personas y su tolerancia cero contra todo tipo de abusos en cualquier ambiente eclesial”, señaló la comunicación firmada por el sacerdote Uriel Pimienta Algarín, delegado de comunicaciones de la Diócesis de Montería.

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