Un nuevo caso de intolerancia contra el personal de la salud se presentó en el municipio de La Unión, departamento de Antioquia, el pasado domingo 27 de febrero. Un médico y una enfermera fueron agredidos por un paciente en estado de embriaguez al cual atenían en el servicio de urgencias del Hospital San Roque.
Según la denuncia de Natalia Bedoya, esposa del doctor Jonathan Rodas Ríos, involucrado en las agresiones, el día de los hechos “llevaron a un paciente porque la familia manifestaba que había convulsionado, pero al revisarlo el tipo olía a licor y empezó a agredir a mi esposo y a la enfermera de turno. Al tratar de calmarlo, el sujeto le dio un cabezazo”, aseveró en declaraciones al diario Mi Oriente.
Además, la mujer señaló que la Policía arribó al centro de salud “y no ejerció su autoridad”, pues le manifestaron que “para qué iba a poner la denuncia si eso ya había pasado con otros médicos y ellos no habían dicho nada”.
El médico Jonathan Rodas sostuvo, en palabras recogidas por Diario Oriente, que la enfermera resultó atacada en el rostro mientras intentaba estabilizar al ciudadano: “El paciente intentó agredirnos, se intentó tirar de la camilla, al intentar contenerlo, le sostuvimos las dos manos, se logró soltar la mano que tenía la enfermera y le propinó dos golpes en la cara, a mí también intentó golpearme y al esquivarlo, el paciente me pegó con la cabeza en toda la cara”.
En el caso del doctor, los primeros exámenes dan cuenta de una presuna fractura en el pómulo y una hemorragia conjuntival. La auxiliar, por su parte, también evidenció lesiones. “Los dos están incapacitados. La enfermera inicialmente por cinco días y el médico por diez” sostuvo la gerente del hospital, Olga Cecilia Echeverría, quien, además, rechazó estos actos de violencia:
“Hay algo muy claro y es que el hospital está hecho para darle atención a la comunidad, pero si la comunidad no lo cuida, ¿qué pueden tener el día de mañana? La intolerancia, el alcohol y las sustancias alucinógenas han hecho que en esta país se viva una situación muy difícil en los hospitales públicos”, según recogió RCN Radio.
La comunidad ha solicitado, en reitradas oportunidades, que se disponga de miembros de seguridad en el hospital con el fin de evitar más agresiones; no obstante, la Alcaldía de La Unión todavía no se ha pronunciado al respecto.
“Hemos pedido que contraten un vigilante y hasta el momento no lo hay. El llamado también es a la comunidad para que sean conscientes de que nada justifica la violencia. No es la primera vez que esto ocurre, lo que pasa es que no había trascendido. Solicitamos garantías para el personal de salud”, concluyó Natalia Bedoya.
Hace algunos meses ocurrió el caso de un sujeto que ingresó al mencionado establecimiento médico, amenazó al personal y luego agredió a uno de los pacientes con un arma blanca.
Recuerde que a partir de este martes 1 de marzo, los 451 municipios del país que cuentan con más del 70 % de cobertura total (dos dosis) en la vacunación contra el covid-19 levantarán la exigencia del uso obligatorio del tapabocas en los espacios públicos abiertos. Bogotá, Medellín, Barranquilla, Cartagena y Bucaramanga son algunas de las principales ciudades que ya no exigirán esta medida.
Sin embargo, poblaciones como Cali todavía no podrán acceder a dicha determinación, pues el porcentaje de ciudadanos que cuentan con el esquema completo es del 67 %. Esto ha provocado que las autoridades sanitarias de la capital vallecaucana opten por distribuir los biológicos en áreas específicas para acelerar la inmunización.
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