Mutilaciones y ritos diabólicos: la historia de “El Satánico”, el presunto asesino en serie que está libre en Barranquilla

En el 2018 un estremecedora historia de feminicidio golpeo de forma significativa a la sociedad barranquillera. Luego de que el cuerpo de Brenda Pájaro, una mujer que residía en el barrio Costa Hermosa en el municipio de Soledad, apareciera sin vida en una zona enmontada en el sector de Miramar, al norte de la ciudad tras un mes desaparecida.

Cuando el cuerpo de Pájaro fue revisado, las autoridades encontraron signos de violencia sexual y tortura. Tiempo después y tras una larga investigación se comprobó que su agresor había sido Tomás Maldonado Cera de 51 años de edad. La vinculación del feminicida se dio gracias a las imágenes de una cámara de seguridad que mostró los últimos minutos de vida de la mujer.

De acuerdo con las autoridades antes de su muerte Brenda llevó a su hija a un centro de rehabilitación en donde recibía atención por su parálisis cerebral y posteriormente se fue con su victimario, lo que hizo creer que mantenía un relación con el sujeto, pero los familiares de la mujer negaron que fuera cierto y agregaron que solo era un conocido.

“Las cámaras mostraron que la señora Brenda abordó un vehículo Chevy Van Pass primera serie, con placas amarillas desde el centro médico donde atendían a su hija periódicamente y se dirigió hacia el sector de Miramar, donde descendió junto a un hombre, que es Tomás Maldonado, se internaron en el lugar donde posteriormente fue hallada muerta. Luego de varios minutos, sale del lugar únicamente el hombre, aborda el vehículo, ahí espera unos ocho minutos y luego se va del lugar”, sostuvo la Policía Metropolitana.

Pero el caso no quedó ahí, pues el feminicidio de Brenda Pájaro fue sola la punta del iceberg, ya que las autoridades encontraron que Maldonado se encontraba relacionado con al menos otros 10 crímenes cometidos entre el 2002 y el 2012 en Barranquilla que no se habían podido relacionar.

De acuerdo con El Tiempo, en el caso de Brenda se pudo hallar que el agresor le quito el dedo medio y el anular, además, en donde fue encontrado el cuerpo había una estrellas de cinco puntas y en la frente la víctima tenia un Z lo que, de acuerdo con los investigadores, parece ser parte de un ritual satánico, pues es una señal que se ha visto en otras mujeres, razón por la que fue apodado como “El Satánico”.

Posterior al descubrimiento y el despliegue de las autoridades el hombre fue capturado por las autoridades en febrero de 2019 y puesto en custodia por los delitos de feminicidio agravado, acceso carnal violento y hurto calificado agravado. Pero pese a la gravedad de las acusaciones en julio del 2020 “El Satánico” quedó en libertad por el Juez 17 Penal, con funciones de control de garantías, luego de que se vencieran los términos de la medida de aseguramiento por la que permanecía recluido en la Penitenciaría El Bosque en Barranquilla.

Los barranquilleros pide la pena máxima para el sujeto, pues en el 2012 fue puesto en libertad por falta de pruebas en los crímenes de Osnaider Gutiérrez; un menor de 13 años, Yilibeth Yirina Manjarrés Almarales, Aída Rocío Antolinez Lizarazo y Miguel Alfonzo Gil Rodríguez; y años después reapareció y asesinó a Brenda en el 2018 (único caso en el que se tiene pruebas contundentes).

Pues por ejemplo, en el caso de Aída Rocío Antolinez Lizarazo de 34 años; la mujer había afirmado que saldría con un hombre. Hizo una llamada a Maldonado desde el teléfono de una prima; por lo que las autoridades estuvieron en alerta; pero nuevamente los jueces dictaban; que una llamada no era suficiente prueba para enviarlo a la cárcel. En el caso de Yilibeth Yirina Manjarrés Almarales fue similar pese a que ya había sido sospechoso en un crimen parecido.

Pese a todas la acusaciones y pruebas, el hombre ha negado que este relacionado con todos los crímenes y se ha declarado inocente en todos las oportunidades en las que ha sido acusado.

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