Reportan el homicidio de tres mujeres transgénero en febrero

La comunidad de mujeres transgénero pasa por un pésimo momento luego de que tuvieran que reportar el homicidio de tres de ellas en diferentes ciudades del país en lo corrido de este mes.

En la Red Comunitaria Trans informaron que estos crímenes, que señalan fueron motivados por la transfobia, ocurrieron en las ciudades de Quindío, Cauca y Caldas.

“Cerramos la semana con dos hermanas asesinadas. Cristin Meneses fue asesinada en Puerto Tejada (Cauca) y Johana, mujer trans habitante de calle, la mataron en Armenia (Quindío)”, publicaron en su cuenta de Twitter.

Posteriormente, en la misma red social indicaron que una tercera, proveniente de Venezuela, había sido asesinada en la capital Caldense: “Mientras despedíamos a 2 mujeres trans asesinadas… estaban matando a Isabela Vargas, mujer trans venezolana trabajadora sexual, en Manizales ¡Las mujeres trans no somos peligrosas, estamos en peligro!”.

En esa organización que trabaja por los Derechos Humanos de las personas transgénero en el país cuestionaron el accionar de las autoridades para esclarecer estos crímenes.

“Para nadie es un secreto que nos encontramos en un momento de retroceso respecto a los derechos alcanzados para las personas trans en Colombia. ¿Qué debemos hacer para dejar de naturalizar que cada semana estén matando una personas trans en Colombia? ¿Hasta cuándo Fiscalía General de la Nación?”, reprocharon.

También criticaron que dentro de la contienda electoral por la Presidencia de la República no se haya tenido en cuenta el tema de la violencia en contra de la comunidad transgénero en el país.

“El gobierno de Iván Duque es cómplice del exterminio que estamos viviendo en Colombia. Doloroso que ninguna candidata/o a la presidencia se haya pronunciado frente al asesinato de tres mujeres trans asesinadas en una semana. ¡Nos matan en su cara!”, señalaron.

De acuerdo con un informe de la Defensoría del Pueblo, durante el años pasado tenían el registro de que 35 de ellas fueron asesinadas en 2021. En aquella ocasión Carlos Camargo, defensor del Pueblo, manifestó que las mujeres de esta comunidad son las que “con más rigor soportan la marginación y violencia”, razón por la cual solicitó a las autoridades fortalecer las investigaciones para esclarecer los homicidios.

También exhortó a la Unidad Nacional de Protección (UNP) a implementar los análisis de riesgo conforme al Protocolo de Valoración de Riesgos para lideresas y defensoras de derechos humanos y que las autoridades recojan las recomendaciones emitidas por la Defensoría en las Alertas Tempranas para prevenir estos casos.

“Hacemos un llamado a la sociedad para que no se naturalice el odio y el prejuicio en contra de las personas con orientación sexual e identidad de género diversas y a todas las entidades para que su acción sea desprovista de estos sesgos”, dijo.

El pronunciamiento de esa entidad gubernamental se dio con motivo del homicidio de tres personas trans durante la celebración de la noche de velitas. Una de las víctimas fue ‘La Divaza’, una persona no binaria, es decir, que no se identifica con ningún género, que fue ultimada con arma blanca en Riohacha (Guajira): “Fue una habitante en condición de calle quien falleció como consecuencia, aún por esclarecer, de una riña, en la cual recibió una puñalada en el pecho, dejándola gravemente herida y falleciendo minutos después”, informó entonces la organización Caribe Afirmativo.

A este crimen se suma otro ocurrido en Santa Marta, también en el Día de las Velitas, en contra de Cristina Isabel Cantillo, lideresa social que promovía los derechos de las personas transgénero. La mujer fue ultimada por un sicario frente a su familia sobre las 7 de la noche en el barrio Luis Carlos Galán, en el oriente de la capital de Magdalena.

Al parecer, la mujer ya había recibido amenazas de muerte por parte del Clan del Golfo, y tuvo que desplazarse ante la revictimización que recibieron de la Policía cuando “buscaban protección”, según el citado medio.

El último caso tuvo lugar en Bogotá. ‘Maní’, quien era afro y trabajadora sexual, también recibió heridas mortales con arma blanca, que la llevaron a perder la vida.

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