Tras el robo de las grabaciones de las entrevistas que le realizaron al otrora máximo jefe criminal del Clan del Golfo, Dairo Antonio Úsuga alias Otoniel, ante la Comisión de la Verdad, que denunció dicho hurto este fin de semana, la Oficina en Colombia de la Alta Comisionada de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos condenó lo ocurrido e instó a las autoridades colombianas a proteger a los integrantes de esa entidad estatal que surgió tras el acuerdo de paz entre la extinta guerrilla de las Farc y el Estado colombiano.
Desde esta división del organismo multilateral en el país rechazaron “los graves hechos denunciados, que ponen en riesgo los derechos a la integridad y a la vida de quienes conforman la Comisión y el derecho de las víctimas a la verdad” y le solicitaron al gobierno del presidente Iván Duque que se tomen medidas “inmediatas y urgentes para garantizar y proteger” la labor de la Comisión, entre las que se encuentran la investigación eficaz, el esclarecimiento de los hechos denunciados, la determinación de los responsables y la protección de sus funcionarios y de la información que recaben en el desarrollo de su mandato.
“Este organismo tiene un rol fundamental para satisfacer los derechos de las víctimas, en particular el derecho a la verdad, por eso es indispensable su autonomía e independencia”, agregaron en la oficina de Naciones Unidas en un comunicado.
El hurto de la importante información del capo del grupo narcotraficante que desciende de los antiguas Autodefensas Unidas de Colombia (Auc) ocurrió en la noche del viernes en la vivienda del investigador Eduardo Andrés Celis Rodríguez quien se había reunido con ‘Otoniel’.
A través de un comunicado la Comisión de la Verdad señaló que: “(Ese robo) atenta contra uno de sus funcionarios y contra el trabajo de esclarecimiento del conflicto armado en el país y pide a las autoridades competentes investigar de manera diligente y eficaz los hechos”.
Además exigió garantías para continuar con la entrevista, como que se le garantice la seguridad de quienes participan en el proceso, la privacidad de las sesiones y el apoyo logístico por parte de quienes tienen la custodia del entrevistado.
Entre tanto en la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP) expresaron también su rechazó y se solidarizaron con la Comisión de la Verdad a raíz del hurto y recordaron que la labor del organismo es “fundamental para la adecuada implementación del Acuerdo Final de Paz” por lo que “la recolección de información no puede verse afectada por hechos de esa naturaleza”.
Mientras que el director de Investigación Criminal e Interpol (Dijín), el mayor general Fernando Murillo, precisó que la denuncia que recibieron es por dos grabadoras y un celular, e indicó que la Comisión de la Verdad se tiene que dirigir a la Fiscalía para que se adelante a la investigación.
La Policía de Colombia anunció el jueves la suspensión de la diligencia que “Otoniel” cumplía ante la Comisión de la Verdad porque “se vulneraron los protocolos de seguridad” al darse a conocer el sitio donde se llevaba a cabo la entrevista. El máximo jefe del Clan del Golfo fue capturado el pasado 23 de octubre en una zona de Urabá, en el noroeste del país, y luego trasladado a Bogotá en donde ha rendido su versión sobre el conflicto armado interno ante la Comisión y también ante la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP).
Estados Unidos pide la extradición del jefe criminal para que responda ante cortes de Nueva York y Florida por cargos relacionados con el narcotráfico. Contra Úsuga hay en Colombia 122 órdenes de captura y seis sentencias condenatorias, entre ellas dos de 40 y 50 años de prisión, por homicidio agravado, homicidio en persona protegida, desaparición forzada, desplazamiento forzado y reclutamiento ilícito de menores
(Con información de EFE)
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