Josh Medina o también conocido como el chamo de las mil voces, recordado por su participación en ‘Yo me llamo’, es un artista venezolano que emigró de su país buscando un mejor futuro en Colombia, debido a la crisis económica y política que atraviesa su nación.
En su llegada a territorio colombiano, intenta abrirse camino en Bogotá, pero sin lograr su objetivo decide radicarse en la ciudad de Medellín. La primera vez que se presentó a ‘Yo me llamo’, contó en entrevista con el periodista Leonardo Villalobos en su canal de YouTube que no lo dejaron avanzar más de las segundas audiciones por no tener el permiso de residencia que exigían en ese momento para trabajar en el país.
En la temporada que está al aire en Canal Caracol, el imitador se presentó con las voces de Ana Gabriel, Vicente Fernández, Eros Ramazzotti, Juan Gabriel, su compatriota Nacho, entre otros, quedándose con la voz del intérprete de música urbana en la competencia.
En entrevista con el programa de entretenimiento ‘La Red’, el venezolano abrió su corazón y contó los graves problemas de adicción que le generó la pandemia, pero con la llegada nuevamente del reality musical, logró salir adelante para poder darle un mejor ejemplo a su hija y a su familia.
“Cuando cae lo de la pandemia toca encerrarse por completo. En ese tiempo antes de que sucediera todo esto, ya yo había empezado a estudiar producción musical y producción audiovisual, por lo que me pega fuerte ya que yo me la pasaba estudiando y tanto estudio, llegó un momento en que la ansiedad y la depresión eran muy grandes”, relató el artista para el programa de entretenimiento.
Le puede interesar: Valla de publicidad política de Angélica Lozano le disgustó al candidato y congresista Gustavo Bolívar
En su relato, recordó que por la ansiedad y la depresión empezó a fumar marihuana para relajarse, cosa que le ayudaba a alejar las preocupaciones de su mente, sin embargo, esto se le convirtió en una obsesión que lo estaba sumiendo en el más profundo de los abismos.
“Cuando algo se convierte en una rutina es cuando comienzan los daños, comienza a perjudicar nuestro organismo. Entonces yo fumaba y estudiaba, a veces intentaba dejarlo por semanas, me daba un dolor fuerte en el pecho que me impedía respirar”, agregó para ‘La Red’.
En vista del problema de ansiedad que le estaba generando el no fumar, que repercutía en su estado de salud, después de 15 días vuelve a recurrir a la sustancia alucinógena y se da cuenta que el dolor en el pecho se va, por lo que se da cuenta que comienza a depender de la marihuana para llevar sus días más tranquilos.
“Estoy a depender de este vicio y dije ‘no’, tengo que hacer algo rápido porque fueron dos años en eso y si no hago algo rápido lo podía lamentar”, puntualizó Josh Medina.
Cuando se da cuenta que perdió el control con las drogas, recapacitó y se dio cuenta que también podría perder a su familia y fue en una discusión con su esposa, que toma la decisión de irse de su casa, lo que lo hizo buscar una solución al grave problema de adicción que le estaba generando la marihuana.
El artista se fue a vivir con un amigo y estando allí, ocurrió algo que lo hizo recapacitar cuando quería recaer en el vicio, por lo que estando a punto de encender el cigarrillo pensó en su pequeña hija y lo que sería de ella si lo viera en esa situación.
Al revisar entre las cosas que tenía guardadas en un cajón, encontró una biblia y desde ese momento se convirtió al cristianismo y con la llegada de ‘Yo me llamo’, encontró el reconocimiento que estuvo buscando desde hace algún tiempo. Reveló además que lleva cerca de 6 meses sin consumir la sustancia psicoactiva.
“Las bendiciones llegaron, ‘Yo me llamo’ un éxito a nivel nacional e internacional, porque no ha sido solamente aquí en Colombia, Venezuela, Perú, Chile, Argentina, Ecuador, Miami, ha sido una belleza todo esto y no hay mal que por bien no venga”, concluyó Josh Medina para ‘La Red’.
SEGUIR LEYENDO: