Íngrid Betancourt aseguró que Piedad Córdoba sí tiene responsabilidad por su cautiverio

Este miércoles, la candidata presidencial por el partido Verde Oxígeno brindó su declaración ante la Corte Suprema de Justicia por el caso que involucra a Piedad Córdoba

Guardar
Piedad Córdoba e Ingrid Betancourt
Piedad Córdoba e Ingrid Betancourt

La candidata presidencial Íngrid Betancourt rindió declaración ante la Corte Suprema de Justicia sobre el caso que vincula a Piedad Córdoba con la presunta manipulación en los tiempos de liberación de los secuestrados de la extinta guerrilla de las Farc.

El testimonio de la líder del partido Verde Oxígeno se da después de las declaraciones que brindó el antiguo asesor de Piedad Córdoba, Andrés Vásquez. El ex empleado aseguró que, la ahora precandidata al Congreso por el Pacto Histórico, retrasó la liberación de Ingrid Betancourt y de los tres contratistas norteamericanos por intereses políticos.

Es preciso recordar que Piedad Córdoba tenía en 2007 permiso del Gobierno de Álvaro Uribe para ser mediadora con las Farc y lograr liberaciones. Según Vásquez, la candidata al Congreso habría pedido que la liberación de Ingrid Betancourt, quien duró poco más de 10 años secuestrada, no se hiciera pronto.

“Hay diferentes acuerdos entre las tres partes, en donde todos se verían beneficiados, entre ellos que si se entregan los secuestrados a Chávez, Chávez sube la popularidad y ganaba el referendo que venía en diciembre 7 de 2007 y también que catapultó a Piedad con el tema del proceso de paz para ser presidente”, explicó el exasesor en Noticias Caracol.

Según el testimonio revelado por el noticiero, Córdoba, quien supuestamente era conocida como alias ‘Teodora’, habría sostenido reuniones con Iván Márquez, Raúl Reyes, Rodrigo Granda y Jesús Santrich en campamentos ubicados en la frontera con Venezuela y asegura haber estado allí en las reuniones.

Las declaraciones de Ingrid Betancourt

Con respecto a la declaración ante el Alto Tribunal, Betancourt contó cómo fue su cautiverio entre 2002 y 2008. La candidata señaló a los medios de comunicación que, según lo narrado por Vásquez, para ella Piedad Córdoba sí tiene responsabilidad; sin embargo, al ser víctima de secuestro considera que no es un testigo objetivo en el caso.

“Para mí, sí, y hoy más que nunca. Eso lo señaló inteligencia militar en su momento”, comentó ante los medios de comunicación. La exsecuestrada explicó que tenían las pruebas, habían rastreado, cotejado en su momento información; “aquí no hay sombra de duda”, agregó.

Íngrid Betancourt no dio más detalles acerca de las presuntas pruebas del exasesor, quien afirmó que existía un cronograma de personas secuestradas. La candidata fue enfática en que esa información ya está bajo reserva en el despacho de la magistrada Cristina Lombana y aseveró que “pronto se sabrá la verdad” de lo ocurrido.

“La verdad es que así se dio, esos son hechos que son comprobados por la manera en cómo se fueron dando las liberaciones; no quisiera decir nada que pudiera invalidar mi testimonio”, puntualizó Betancourt.

La respuesta de Piedad Córdoba

Córdoba ejerció su derecho a réplica después de la presentación del informe de Noticias Caracol. La actual candidata indicó que es “víctima de un linchamiento mediático” por parte de sus enemigos políticos. “Buscan cercenarme de mis derechos políticos”, motivo por el cual “exijo en mi nombre, en el de mi familia, y en el de todo el Pacto Histórico plenas garantías para los próximos comicios y para ejercer nuestro derecho a hacer política”, explicó a través de un comunicado de prensa.

Para la candidata, las declaraciones de Vásquez ante la Corte Suprema de Justicia carecen de “fundamento alguno” además de no contar con su defensa para los respectivos descargos. Señala que dicho testigo evadió tres citaciones y que, ante la inminencia de un arresto, “acudió conminado a arresto por la Magistrada Cristina Lombana, quien se desplazó hasta Miami para hacer posible este testimonio ahora filtrado selectivamente a la prensa en clara violación de la reserva sumarial”.

SEGUIR LEYENDO:

Guardar