En una operación conjunta de autoridades ambientales y judiciales, fueron capturadas trece personas en Villavicencio al ser sorprendidas trabajando en la construcción de canchas sintéticas sobre un área de conservación natural; de forma específica, un humedal.
El terreno sobre el cual se estaba haciendo la construcción es el humedal Quebrada Honda, ubicado en la calle 1 No. 22 – 58, sector del anillo vial de la ciudad.
La investigación fue adelantada por la Seccional de Investigación Criminal (Sijin) de la Policía Metropolitana de Villavicencio, la Fiscalía General de la Nación —que llevaba quince días de investigación sobre las actividades adelantadas en el humedal—, la Alcaldía de Villavicencio, la corporación ambiental Corpomacarena y el Batallón de Ingenieros de Combate del Ejército Nacional de Colombia.
Tras los hallazgos de la Fiscalía Quinta Especializada de Villavicencio, fue ordenada una diligencia de registro y control por parte de la Sijin. Durante ese operativo, las personas fueron capturadas en flagrancia por el delito de daño a los recursos naturales.
El predio en el que se estaba adelantando la construcción de las canchas sintéticas es, de hecho, un terreno en manos de privados. No obstante, los propietarios no contaban con la autorización para adelantar ninguna obra de construcción en el lugar, puesto que se trata de un área protegida y una intervención de ese tipo puede poner en riesgo el ecosistema.
¿Por qué es importante este humedal?
En 2015, Corpomacarena solicitó que Quebrada Honda fuera declarada una Reserva Forestal Protectora, denominación que fue respetada por Parques Nacionales Naturales. Es una de las doce áreas protegidas dentro de la jurisdicción de Villavicencio.
La corporación ambiental hizo la solicitud con varias motivaciones. En Quebrada Honda hay una pequeña cuenca de agua dulce, propiciada porque el terreno abarca ecosistemas de páramo, bosque montañoso y tropical. La cuenca alimenta fuentes hídricas como las quebradas El Tigre, Los Buitres, El Duente, La Sapa, Colorada y El Pito, así como sus caños asociados.
El sitio, que comprende más de 1.200 hectáreas, también es hogar de especies de fauna y flora que Corpomacarena está interesada en proteger. Es el caso de los bosques de comino, la palma de cera, el águila pescadora, el oso de anteojos, el venado soche, los quetzales y el gallito de roca.
No obstante, Quebrada Honda está amenazada por varios factores. En primer lugar, el terreno es arcilloso y tiende a deslizarse cuando hay lluvias intensas; este es un proceso natural difícil de detener. Por el otro lado, fenómenos como los monocultivos, la ganadería extensiva y la tala discriminada incrementan esta erosión y dificultan aún más la preservación de esta fuente de agua dulce.
Según el último Plan de Desarrollo de Villavicencio, el departamento del Meta sufre mucho en temporadas secas por falta de regulaciones sobre el manejo de aguas domésticas y falta de logística en la disposición de residuos.
Entonces, el propósito de proteger ese terreno es mantener las coberturas vegetales en su estado natural, de modo que sigan produciendo el agua que llega al 70% de los habitantes de la capital llanera, más el 100% del municipio de El Calvario y veredas aledañas. Además, existe el interés de que los habitantes tradicionales de la zona puedan subsistir del ecoturismo y el manejo responsable del recurso allí disponible.
En general, los humedales de Villavicencio son zonas en las que se refugian muchas especies de flora y fauna, mitigan las inundaciones, regulan la sequía, entre otros aspectos importantes; por ello requiere de la protección no solo de las autoridades, sino también de la ciudadanía, con el fin de preservar los ecosistemas.
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