MOE solicita a la Registraduría “no presidencializar las elecciones del Congreso”

La Registraduría Nacional tomó la decisión de priorizar el conteo y el escrutinio de los tarjetones de las consultas interpartidistas en vez de las tarjetas correspondientes a las elecciones de ese día

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Bogotá. 12 de Enero del 2022. La Registraduría Nacional sorteó la ubicación de los logos de los partidos y movimientos políticos para las elecciones de Congreso de la República. (Colprensa-Sergio Acero)
Bogotá. 12 de Enero del 2022. La Registraduría Nacional sorteó la ubicación de los logos de los partidos y movimientos políticos para las elecciones de Congreso de la República. (Colprensa-Sergio Acero)

La Misión de Observación Electoral (MOE) manifestó su preocupación frente a los comicios del Congreso que se celebrarán el próximo 13 de marzo. La entidad criticó la decisión de la Registraduría Nacional de priorizar el conteo y el escrutinio de las tarjetas electorales correspondientes a las consultas interpartidistas para la selección de candidaturas a la Presidencia a la República antes que el correspondiente conteo de votos de Senado de la República y de Cámara de Representantes.

Si bien la ley señala que en las elecciones a corporaciones públicas se podrán realizar consultas interpartidistas populares y que la organización electoral prestará su colaboración a los partidos y movimientos políticos para que puedan efectuarlas, “la priorización anunciada hace que se pierda de vista lo que convoca a estos comicios: la elección de los representantes de una de las ramas del Poder Público”, explicó la entidad.

La directora de la MOE, Alejandra Barrios, afirmó que ven “con preocupación la presidencialización de las elecciones a Congreso de la República”. Por esa misma razón, la entidad le solicitó a la Registraduría que reconsidere su decisión de priorizar el preconteo con los tarjetones de las consultas interpartidistas, “y que priorice aquellas que por código electoral corresponden a las elecciones de ese día”, agregó.

Cabe recordar que para los comicios de la Cámara y el Senado habrá 2.835 candidatos en contienda distribuidos en 538 listas, dentro de los cuales se incluyen los 403 candidatos para ocupar las 16 curules de paz.

Ante el riesgo expuesto por la entidad, Infobae Colombia habló con Diego Alejandro Rubiano, subcoordinador del Observatorio Político Electoral de la Democracia de la MOE, quien explicó por qué resulta alarmante esta priorización con respecto a lo que sucedió en las elecciones al Congreso de 2018.

En las votaciones del 11 de marzo de ese año, se concentró una participación cercana al 50 % del censo electoral, que representó 17′872.988 votos. Las consultas que se registraron en 2018 tuvieron cerca de una participación del 20 % frente al primer porcentaje de la votación total.

La Gran Consulta por Colombia tuvo 4′005.863 votos, cuyos candidatos eran: Marta Lucía Ramírez, Alejandro Ordoñez e Iván Duque, y hubo 3′409.301 de la consulta por la Inclusión Social en la que participaron Gustavo Petro y Carlos Caicedo.

“Esto nos afecta porque llegamos a priorizar en este caso una elección que no tiene igualdad de condiciones con todos los partidos políticos, pues no todos están solicitando la realización de las consultas - argumentó Rubiano -. Mientras que la elección de una de las ramas del poder público, que en este caso es el poder legislativo, donde todos los partidos están presentando candidatos y tiene intereses de por medio”.

El funcionario de la MOE explicó que la propuesta de priorizar las tarjetas electorales del legislativo se hizo en el marco de la Comisión Nacional de los Procesos Electorales y fue apoyada por delegados de las distintas organizaciones políticas. “Esto obliga a la Registraduría a encontrar un acuerdo entre organización electoral, organizaciones políticas y observadores para poder acordar cómo se va a hacer el escrutinio de mesas sin afectar las elecciones del Congreso”, aseguró Rubiano.

El subcoordinador también afirmó que la priorización de los tarjetones debería realizarse de la siguiente manera: “Primero la circunscripción nacional del Senado de la República, luego las circunscripciones especiales y finalizar con el escrutinio de la circunscripción de Cámara de Representantes”. Después de todo ese proceso, Rubiano puso en último lugar el conteo de las consultas que van a tener lugar ese mismo día.

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