Aunque Rodolfo Hernández intentó evitar echar para atrás sus palabras, el juez Cuarto Civil Municipal de Bogotá ordenó en segunda instancia que el exalcalde de Bucaramanga deberá retractarse de sus declaraciones en contra del exsenador Julio César Caicedo, esposo de Dilian Francisca Toro, presidenta del partido de La U.
La disputa legal entre Caiceo, Toro y Hernández venía desde mayo de 2021 cuando en una entrevista radial, el ahora candidato presidencial se refirió a la exgobernadora del Valle del Cauca y, aunque aseguró que no la conocía, supuso vínculos con el narcotráfico.
“Pues yo no la conozco a ella, yo lo que sé es que por allá la familia o el marido está ligada con el narcotráfico”, señaló Hernández en una entrevista que desató una férrea respuesta por parte de la pareja de políticos, quienes instauraron una tutela para solicitar rectificación ante la afectación del buen nombre.
“Rodolfo, el abusador, pone en riesgo la tranquilidad de mi familia, usando difamaciones en mi contra como cortina de humo para ocultar los actos de corrupción que lo tienen enfrentando graves cargos penales y que está en etapa de juicio por qué pidió según la fiscalía a través de su hijo coimas en un contrato de consultoría para licitar el manejo de las basuras en el relleno sanitario el carrasco”, le contestó entonces el exsenador Caicedo.
Según dijo Julio César, el exalcalde de Bucaramanga utilizaba su nombre para atacar a Toro por beneficio político en medio de la campaña presidencial, cuando ella aún sonaba en la baraja de posibles candidatos y en la que aspira Hernández.
Hasta agosto se emitió un primer fallo por parte de la jueza María Fernanda Escobar ordenó, en un fallo de seis páginas, “tutelar el derecho al buen nombre y la honra de Toro y Caicedo”. En la decisión ordenó a Rodolfo Hernández Suárez que, en el término de 48 horas siguientes a la notificación de la decisión judicial, rectifique la afirmación que hizo en contra de la exgobernadora del Valle que contenía las siguientes palabras.
Hernández, en lugar de retractarse, apeló la decisión y buscó defenderse para no echar atrás sus palabras, pero el juez consideró no existía sustento para mantener sus declaraciones en contra de los políticos, por lo que dejó en firme la decisión de primera instancia.
“Esa información no corresponde a la realidad, toda vez que en ninguna de las notas periodísticas a las que hizo alusión el accionado se menciona que la familia y el esposo de Dilian Francisca Toro tengan vínculos con el narcotráfico, de manera concreta”, sostuvo la primera juez.
“Nuevamente un juez de la república nos da la razón y pone en evidencia que el señor Rodolfo Hernández no solamente se burla de la justicia y miente descarada y abiertamente al país, ordenándole rectificarse en sus sucias acusaciones contra mi buen nombre y honra y con el de mi esposa, Dilian Francisca Toro. Queda clara la decisión del juez Veintidós civil del circuito de Bogotá, que respalda el fallo proferido por el juzgado Cuarto civil municipal de septiembre del año pasado, que muestra que no existen pruebas ni evidencias para que el señor Hernández difame en mi contra”, señaló Caicedo.
“La verdad siempre sale a flote y quien miente y burla descaradamente, en algún momento su disfraz se cae. Espero que quien dice ser honesto y respetuoso tenga por fin la valentía de rectificarse y respetar la ley y no seguir manchando con propósitos electorales y bajos el buen nombre mío y el de mi esposa”, concluyó el ex senador.
Sin embargo, no es la única declaración en ese sentido que ha hecho Hernández en contra de Toro. En diciembre, cuando el exalcalde esperaba que no le tocara retractarse, señaló en entrevista en el programa de Juanpis González, que Toro “está casada con un narcotraficante”.
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