En una acción liderada por la Armada Nacional, y con el apoyo del Ejército Nacional y la Policía Nacional, las autoridades lograron dar otro golpe contra las Autodefensas Gaitanistas de Colombia (AGC), también conocidas como Clan del Golfo. Este 6 de febrero, en Caucasia (Antioquia) se encontraron, y destruyeron de forma controlada, diez dragas artesanales y 20 motores tipo motobomba con los que la mencionada estructura extraía minerales de forma ilícita. Se mencionó que durante la operación no se presentaron capturas.
“Se realizó la destrucción controlada de diez dragas artesanales y 20 motores tipo motobomba en el área general de Caucasia, Antioquia. Las diez dragas artesanales presuntamente eran empleadas para labores de explotación ilícita de yacimientos mineros sobre el río Cauca a la altura del municipio de Caucasia, siendo esta una práctica prohibida por su alto impacto y el daño ambiental que ocasiona la maquinaria y el uso del mercurio”, aseguró la Armada Nacional a través de un comunicado de prensa.
La fuerza pública indicó que las tropas del Batallón Fluvial de Infantería de Marina No. 17 de la Armada de Colombia, tropas del Ejército Nacional y efectivos de la Policía Nacional realizan labores de control y vigilancia constantes en Caucasia y por eso se logró golpear al Clan del Golfo. Aseguran que las entidades continuarán patrullando la zona.
Las autoridades reiteran que este es un golpe fuerte para la estructura criminal, pues así dejan de percibir dinero que usan para financiarse. Señalan que en estas operaciones es clave la participación de los civiles e invitan a que se vinculen y denuncien a los criminales.
“Con esta destrucción se da un duro golpe al sistema financiero del Clan del Golfo, quienes dejan de recibir mensualmente 24 millones de pesos, producto de la actividad ilícita. Se invita a la comunidad a denunciar cualquier situación relacionada con la minería ilegal, la cual causa daños irreparables al medio ambiente”, dijo la Armada.
Es de mencionar que las autoridades están vigilando Antioquia de forma especial. Incluso, esta semana el Clan del Golfo sufrió otro golpe por parte de la fuerza pública cuando nueve miembros de su grupo fueron dados de baja en medio de una operación ofensiva llamada Cóndor. La acción se ejecutó el 1 de febrero en zona rural del municipio de Ituango (Antioquia).
Se indicó que en la zona rural, justo en los límites con el departamento de Córdoba, los subversivos tienen instalados sus campamentos y hasta allí se desplazaron los militares para desplegar la operación ofensiva. Versiones preliminares señalan que la Fuerza Aérea Colombiana (FAC) llegó bombardeando por aire y el Ejército Nacional atacó armado por tierra.
Esta zona del país es un punto clave para el grupo ilegal porque desde aquí controlan rutas de narcotráfico. Antioquia es ideal para los criminales porque al limitar con Chocó y Córdoba, se convierte en el espacio perfecto para sacar al Pacífico y los estupefacientes. Estas actividades ilícitas también dan pie para que se eleven los casos de extorsión, desplazamiento y reclutamiento forzado, lo que perpetua la violencia que se vive en el departamento.
Es de recordar que un informe publicado por la Policía Nacional en noviembre del año pasado, indica que el Clan del Golfo opera el 12 % del total de cultivos ilícitos en los departamentos de Antioquia, Nariño, Norte de Santander, Bolívar, Córdoba y Chocó. Al parecer, el grupo cuenta con 30 de los denominados narcos puros, cada uno con capacidad de enviar a distintos destinos entre 400 kilos y 3 toneladas de droga al mes. Solo en el caso de Colombia, pues la organización tendría tentáculos en otros 28 países, se han identificado al menos 15 puntos de acopio y embarque en las costas Pacífica y Atlántica, para envío de cargamentos en contenedores y lanchas rápidas.
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