Frente a frente estuvieron, nuevamente, Rodrigo Londoño, último comandante máximo de la extinta guerrilla de las Farc, con un grupo de víctimas del atentado al Club El Nogal, en el marco de los 19 años del hecho que dejó 36 personas muertas y alrededor de 200 heridas el 7 de febrero de 2003.
Luego de la firma del Acuerdo Final de Paz, los líderes del antiguo grupo, en cabeza de Julián Gallo y Timochenko, se reunieron en 2017 con el movimiento de víctimas encabezado por la empresaria Bertha Lucía Fríes, llegando a consensos que se basaron en el perdón y la no repetición; gesto que fue muy cuestionado por varios sectores sociales y políticos dada la magnitud de lo ocurrido en el exclusivo club del norte de Bogotá.
Ahora, y conmemorando un nuevo año desde que ocurrió este atentado, se volvieron a sentar ambas partes para ratificar ese acuerdo bilateral y entregar un balance sobre el cumplimiento de aquel pacto firmado hace cinco años.
Durante el encuentro, Londoño reiteró que “no había justificación” para realizar ese ataque que, según la justicia ordinaria, fue planeado y ejecutado por el grupo guerrillero bajo el mando de Hernán Darío Velásquez, alias el paisa.
En ese sentido, afirmó desconocer los motivos que motivaron “a compañeros de las FARC-EP a poner la bomba en el Nogal”, y agregó que ellos tenían la certeza de que allí se reunía la actual vicepresidenta y canciller, Marta Lucía Ramírez, con miembros de grupos paramilitares.
“No me consta, pero así fuera cierto, no era razón para cometer este crimen”, enfatizó el actual congresista del partido Comunes
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Por su parte, Fríes recordó que el proceso de reconciliación con los exFarc empezó con la firma del Acuerdo Final de Paz, celebrada en La Habana, y el triunfo del ‘No’ en el plebiscito llevado a cabo en 2016. En ese orden, recordó que en aquel año ella misma tuvo que viajar a la capital de Cuba para reunirse frente a frente con Iván Márquez, actual jefe de la Segunda Marquetalia, para comenzar lo que ella ha bautizado como un “laboratorio propio”, de cara a forjar un proceso de reconciliación y perdón con sus victimarios.
También, manifestó que como fruto de reuniones previas, ambos han llegado a un punto de “civilización y trabajo conjunto”, pero pese a los avances pidió a la JEP que se abra un caso, para que los líderes del extinto grupo comparezcan ante este tribunal.
Según ella, la Jurisdicción Especial para la Paz no ha priorizado este caso y por lo tanto, no se ha podido cumplir el compromiso de los excombatientes para que aporten la verdad sobre lo ocurrido hace 19 años. “Hoy no estamos en la JEP. Pedimos que seamos el caso número ocho, porque se trata del atentado urbano más grande que hicieron las Farc al país”, mencionó Fríes en el encuentro.
Justamente, se espera que en las siguientes semanas se conozca una decisión por parte del mecanismo de justicia transicional que corresponda al tratamiento del caso del Club El Nogal y la priorización de sus investigaciones.
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Los otros puntos que sí se han cumplido del acuerdo entre víctimas de El Nogal y los ExFarc
El primero, que trata sobre el compromiso de los exguerrilleros en expresas disculpas mediante actos públicos, sí se ha cumplido; de hecho, han sido tres los simposios donde tanto ellos como movimientos de víctimas se han sentado a dialogar,
Otro apartado que se ha ejecutado a cabalidad es el del aporte de verdad a las víctimas y al país; también, han cumplido el punto de participación de una “reconciliación con valores” como lo mencionó la empresaria, a lo que agregó que luego de expresar con ahínco que “odió a las Farc”, ese sentimiento lo ha transformado por uno de perdón con garantías.
Al final del encuentro, Berta Lucía Fríes y Rodrigo Londoño se reunieron en un emotivo abrazo que da cuenta de los avances entre el acuerdo bilateral pactado después del de La Habana.
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