El exmilitar colombiano Mario Antonio Palacios Palacios, de 43 años, se declarará no culpable en el juicio que se adelanta por su presunta responsabilidad en el magnicidio de Jovenel Moïse, presidente de Haití, ocurrido el pasado 7 de julio.
Alfredo Izaguirre, abogado de Palacios, informó la decisión de su defendido durante la mañana de este viernes, mientras abandonaba las instalaciones del Palacio de Justicia del Condado de Miami-Dale, donde se está llevando el caso del magnicidio.
Uno de los argumentos que se usarían durante la audiencia de imputación de cargos es la coartada que dio el abogado días antes en medios locales: según él, Palacios solo llegó a la casa presidencial cuando Moïse ya había sido asesinado.
Por otro lado, el abogado contó que la audiencia de lectura de cargos contra Palacios fue aplazada hasta el 4 de marzo, ya que la cárcel donde permanece duró un tiempo en cuarentena preventiva por covid-19. Además, todas las cárceles de Estados Unidos permanecieron cerradas para visitas por cuenta de una guerra entre pandillas intramurales en Houston (Texas).
Testigo clave
Aunque el crimen contra el mandatario haitiano Jovenel Moïse tuvo lugar en Haití, el Gobierno estadounidense puede juzgar a Mario Palacios porque tiene evidencia de que el asesinato fue orquestado en Florida, dentro de su jurisdicción.
Los otros 25 mercenarios y exmilitares involucrados en la muerte de Moïse fueron detenidos por la justicia haitiana y todavía esperan sus condenas. Desde allá, contaron al medio CNN que no tienen ninguna representación legal, temen por sus vidas y no quieren contar más detalles de lo sucedido hasta tener quien los defienda. “Estamos atrapados en esta prisión (…) Tenemos que quedarnos aquí”.
Acerca del respeto por sus derechos humanos, uno de los entrevistados contó que los maltratos empezaron una vez llegaron a prisión y temen por su vida.
“Tengo miedo por lo que podrían hacerme, pero también por lo que podrían hacerle a mi familia”, narró uno de los exmilitares, quien también denunció que uno de sus compañeros fue apuñalado por la policía haitiana y otros fueron golpeados con las pistolas de los uniformados. Tanto ha sido el maltrato que uno de los hombres tiene el rostro desfigurado por las palizas.
El exmilitar Palacios fue el único que logró escapar de la isla tras el magnicidio. Por eso, Haití emitió circular roja para buscarlo en el exterior, pese a que aún no habían reunido las pruebas suficientes para sindicarlo por el asesinato.
Eventualmente, en octubre pasado encontraron al exmilitar chocoano en la isla de Jamaica y se hizo caso a la circular. Ante la falta de pruebas del Gobierno haitiano, Palacios estuvo muy cerca de ser deportado a Colombia en enero pasado, tras lo cual habría quedado en libertad porque no ha cometido delitos en suelo colombiano.
El avión que deportaría a Palacios se detuvo en Panamá y allí fue informado de otra circular roja emitida por Estados Unidos, Estado que ya sabía sobre el lugar donde fue orquestrado el magnicidio. Con esa información, él fue extraditado a Estados Unidos.
Durante su tiempo en el país norteamericano, el exmilitar chocoano se ha convertido en una pieza clave para conocer detalles sobre el magnicidio.
Él se refirió a un plan inicial de ‘capturar’ al presidente de Haití en el aeropuerto con los mercenarios, donde los conspiradores del gobierno se pondrían capuchas negras y se llevarían al presidente en avión. Según entrevistas con varios conspiradores en custodia del gobierno de Haití, para este punto varios miembros de la conspiración creían que el plan era asesinar y no secuestrar al presidente Moïse, como indicó la investigación norteamericana.
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