Los indígenas de los pueblos Sikuani y Amorúa, además de migrantes, que habitan en Vichada, vuelven a pasar por una crisis que afecta su integridad. Estas poblaciones están ejerciendo el reciclaje irregular y escarban la basura sin cumplir con las medidas de bioseguridad mínimas. Para terminar de agravar el caso, estas personas están ingiriendo residuos de comida que encuentran, pues en muchas ocasiones no tienen como alimentarse ellos y sus familias.
Esta situación se estaría presentando principalmente en el relleno sanitario El Merey, en Puerto Carreño (Vichada), y ha quedado evidenciada en varios videos que circulan en redes sociales. La Defensoría del Pueblo se trasladó hasta allí este 31 de enero y urgió a las autoridades regionales y empresa privada para buscar alternativas que permitan mejorar las condiciones de vida de indígenas y migrantes.
“Necesitamos mejorar las condiciones de vida, dignificar el trabajo que ustedes desarrollan de manera cotidiana, que es el trabajo que les da el sustento para velar por sus hijos y por todo el entorno familiar”, le dijo Carlos Camargo, defensor del Pueblo, a los indígenas y migrantes afectados.
El funcionario aseguró que conoció de primera mano las precarias condiciones en las que estas comunidades indígenas adelantan labores de reciclaje, y por eso puede decir que está población está en riesgo, particularmente los niños, niñas y adolescentes. Señaló que es urgente buscar los mecanismos para restablecer todos los derechos de las comunidades, entre ellos, el derecho a la salud.
Teniendo esto en cuenta, la Defensoría del Pueblo presentó solicitud formal para que se le brinde atención médica a los afectados. Así mismo, pidió trabajar en identificar posibles casos de desnutrición que se presenten en la población.
“La Defensoría del Pueblo presentó solicitud formal ante la Secretaría de Salud del Vichada, la Nueva EPS y el hospital San Juan Dios ESE – IPS, para que de manera urgente se adelante una brigada de salud de atención médica integral a las comunidades que se ubican alrededor del relleno sanitario”, indicó la Defensoría.
Camargo también mencionó que estas familias, ubicadas alrededor del relleno sanitario, están en condición de pobreza extrema, por lo que es importante garantizarles un trabajo digno. Este derecho podría ayudar a que los afectados solventen sus necesidades básicas y dejen de arriesgar su integridad.
Es de mencionar que la propuesta no sugiere que los indígenas y migrantes dejen de dedicarse al reciclaje, sino que lo hagan de manera formal. Sobre todo, que ejerzan cumpliendo las medidas de bioseguridad para para no poner en riesgo sus vidas ni las de sus familias.
“Se requiere organizar directamente con las comunidades indígenas una ruta que permita trabajar en torno a la consolidación de una cooperativa de reciclaje. Desde la Defensoría del Pueblo continuaremos con el seguimiento a esta problemática que afecta a las comunidades indígenas Sikuani y Amorúa, y migrantes”, aseguró Camargo.
Estas acciones fueron celebradas por la gobernadora indígena, Henny Gutiérrez, y el alcalde de Puerto Carreño, Jair Beltrán Hinojosa. Para las autoridades es importante buscar soluciones a esta crisis, pues recuerdan que no es nueva. Desde hace años se viene denunciando que migrantes e indígenas hurgan la basura en Vichada para poder alimentarse.
Teniendo esto en cuenta, el Defensor del Pueblo destacó que es muy importante explorar alternativas directamente con los afectados porque es una problemática cuya solución no puede aplazarse más.
“Elevamos el llamado a toda la institucionalidad de Estado colombiano y a la comunidad internacional a volcar los ojos hacia la población del Vichada y de las zonas de frontera”, finalizó la Defensoría.
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