A comerciante en Medellín le cobraban medio millón de pesos mensual para poder abrir su negocio

Un comerciante venezolano del centro de Medellín abrió su local en la zona hace cuatro meses. Pero para su sorpresa, a tan solo ocho días de la inauguración, tres hombres arribaron a su negocio para exigirle a sus trabajadores el pago de una multa de medio millón de pesos por abrir el establecimiento “sin el supuesto permiso de una banda criminal que delinque en el sector”, informó la Fiscalía.

Algunos de los hechos investigados fue una llamada que recibió el dueño del establecimiento comercial el pasado 15 de enero, en la que le recordaban el pago del dinero a cambio de no tener que abandonar el inmueble con todo lo que tenía en su interior.

Fue así como después de la denuncia del comerciante, servidores del CTI y del Ejército Nacional adscritos al Gaula Militar llevaron a cabo un operativo en donde dieron con la captura de Orlando Rafael Manga Lubo, de 56 años de edad, quien fue sorprendido en flagrancia el pasado lunes 17 de enero, cuando al parecer se disponía a recibir un paquete que simulaba contener la ilícita exigencia económica.

Como presunto responsable de tentativa de extorsión agravada, la Fiscalía obtuvo medida de aseguramiento en centro carcelario en contra de Manga Lugo, quien no se allanó a los cargos imputados.

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16 personas que pertenecían a la banda criminal Los del Pa, que operaba en Barranquilla, fueron capturados el pasado 6 de enero por el Gaula de la Policía Nacional. Las autoridades aseguraron que llevan siguiéndolos desde hace meses porque recibieron más de diez denuncias que darían cuenta que los detenidos han estado extorsionando a comerciantes de los barrios La Pradera, Los Olivos, El Pueblito, El Golfo y El Bosque en la capital de Atlántico.

Información preliminar indicó que los delincuentes llegaban a los locales y les entregaban panfletos amenazantes a los dueños. Además, les pasaban celulares a los que llamaba el supuesto jefe de la organización y les decía que podrían asesinarlos si no les entregaban dinero. Los delincuentes tenían que pagar entre 2 y 5 millones de pesos.

Por estos crímenes, a los 16 capturados se les imputaran los delitos de concierto para delinquir agravado, extorsión, homicidio y tráfico fabricación o porte de estupefacientes.

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Las extorsiones han sido uno de los delitos más denunciados durante el último año en Barranquilla. A finales del año pasado se conoció que alrededor de 40 tenderos en Barranquilla, Soledad y Malambo han cerrado sus locales porque están siendo extorsionados.

Estos dineros estarían llegando a grupos narcoparamilitares con el fin de financiarlos para que compren armas. Además de pagar por la ejecución de actividades ilícitas como el narcotráfico y el microtráfico.

La misma Defensoría del Pueblo emitió una alerta temprana el pasado 13 de agosto en la que advierte el aumento de extorsiones y homicidios en Barranquilla y su área metropolitana, conformada por Soledad, Malambo, Puerto Colombia y Galapa. El organismo de control advierte que hay 28.430 personas en riesgo, y entre ellos hay comerciantes, docentes, activistas, trabajadores informales y comunidades indígenas y afro.

Lo peor en esta situación, es que, según Undeco, entre el 70 y 80 % de los casos, los pequeños comerciantes no se atreven acudir a las autoridades por miedo y acceden al pago de las extorsiones.

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