Durante la audiencia de imputación de cargos, llevada a cabo en los juzgados de Paloquemao, el fiscal del caso, Mario Andrés Burgos, sostuvo que Jhonier Leal González fue el causante de las muertes de su hermano Mauricio, y de su madre, Marleny Hernández Tabares.
En medio de su intervención, el delegado afirmó, en primera instancia, detalles contundentes y, por esa razón, escalofriantes. En primer lugar, detalló que la escena del crimen fue modificada por el también estilista; de hecho, y contrario a lo que sostuvo el implicado en varias entrevistas al afirmar que ingresó a través de una ventana para auxiliar a sus familiares, se evidenció que ninguna ventana ni puerta del cuarto donde ocurrió el crimen fue violentado.
“La única persona que tenía las llaves -del apartamento donde ocurrieron los hechos-, aparte de Marleny y de Mauricio, pues era el señor Jhonier Leal Hernández”, indicó Burgos. En ese orden, descartó que el conductor del estilista fallecido tuviera acceso a la vivienda; es decir, que él no portaba llaves.
Las notas donde Jhonier habría simulado la voz de su hermano
El día de los hechos, entre las 7 y las 8:15 de la mañana, varias empleadas que trabajaban para Mauricio le hicieron llamadas a su celular, con la sorpresa de que este no les contestaba. Además, en horas previas desde su teléfono fueron enviados varios audios donde se escuchaba el mensaje “Perdónenme, los amo; perdónenme, los amo”.
Dichas notas de voz fueron analizadas, arrojando como resultado que “efectivamente, esa voz no es la de Mauricio Leal Hernández”, según relató el fiscal. Asimismo, expuso que la única persona que pudo enviar aquellos mensajes fue Jhonier, quien estuvo acompañando a su hermano.
“La última persona que miró vivos a Marleny Hernández y Mauricio Leal fue Jhonier”: fiscal del caso
En la audiencia, Burgos describió el modus operandi del implicado, subrayando que “Jhonier tuvo suficiente tiempo para modificar la escena”. Además, señaló que varias sábanas estaban cambiadas y que faltaban varias fundas de la cama que hizo parte de la escena del crimen.
“Conjuntamente -Jhonier- baja, con sangre fría, el cuerpo de su madre para acomodarla en la cama de Mauricio, con la mala fortuna de que entre las escaleras quedó una gota de sangre de Marleny Hernández Tabares. No alcanzó a limpiarlas, o bueno, se le pasó”, narró el fiscal. Este hecho, según el delegado, se suma a que Leal, aparentemente, habría cambiado el orden en que quedó uno de los celulares hallados en la escena.
También sostuvo que en el cuarto donde fueron hallados los cuerpos fue encontrada una toalla manchada con sangre de Hernández Tabares, y tras ser sometida a análisis forenses, se hallaron otros restos “con vínculos de parentesco diferentes a los de Mauricio”, dejando como principal sospechoso a Jhonier.
Incluso, precisó que tras el peritaje fue encontrada otra incidencia que llamó la atención: en la terraza del inmueble estaba el trapero con señales de manipulación, y junto a este, varios productos de limpieza, los cuales son guardados por las personas a cargo del aseo del lugar en el cuarto de lavandería.
“Para modificar la escena, Jhonier Leal utilizó guantes para ser difícilmente detectado (…) cambió las sábanas y las fundas, algunas ya no se encuentran en la casa”, aportó también Burgos.
En medio de su intervención, también aseveró que, “La única persona que le interesaba ser el heredero de toda la fortuna que ostentaba Mauricio Leal era Jhonier”, argumentando que para ello se nombró representante legal de la compañía Mauricio Leal Peluquería S.A.S y, con ese fin, retirar el dinero correspondiente a la empresa aún cuando no se había hecho el proceso de sucesión de bienes.
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