Este 16 de enero se conoció un comunicado de la compañía antioqueña Sura sobre la publicación de Revista Semana, donde asegura que el presidente de la empresa, Gonzalo Pérez, habría solicitado un bono de retiro similar al del presidente anterior, David Bojanini.
Sobre la publicación de la revista de los Gilinski, la empresa dijo que el directivo ahora no contempla su salida de la empresa, por lo que no se ha hecho un trámite para la solicitud del bono de retiro.
Históricamente, la remuneración de los empleados de la Compañía está regida por políticas aprobadas en las debidas instancias de Gobierno Corporativo. Además, se han construido a partir de las propuestas de los miembros independientes de la Junta Directiva y han sido revisadas con el apoyo de asesores externo.
Por último, la empresa aseguradora dijo que la información que se publique sobre el grupo debe ser responsable y verificable.
Este es el comunicado completo:
Frente a la información publicada por Revista Semana en la sección Confidenciales este domingo 16 enero, Grupo SURA aclara:
Es absolutamente falsa la información publicada. Gonzalo Pérez, Presidente de Grupo SURA, no ha considerado su retiro de la Compañía ni ha adelantado ninguna acción frente a la Junta Directiva o a cualquier otro órgano de gobierno, como la que menciona la Revista Semana.
Históricamente, la remuneración de los empleados de la Compañía está regida por políticas aprobadas en las debidas instancias de Gobierno Corporativo. Además, se han construido a partir de las propuestas de los miembros independientes de la Junta Directiva y han sido revisadas con el apoyo de asesores externos, siempre buscando la competitividad de los directivos de la Compañía.
Grupo SURA invita a un manejo responsable de la información y con una argumentación basada en hechos verificables, al entender que el actual proceso de OPA sobre la Compañía es un asunto de la mayor importancia para el país, el mercado, los accionistas y demás grupos de interés de Grupo SURA.
Mal comienzo de Gilinski en Sura y Nutresa: crecen tensiones en juntas directivas
Es bien sabido que, cuando los pragmáticos Gilinski llegan a una organización, esta toma un giro de 180 grados para que su nueva adquisición funcione a su favor, sin importar los viejos paradigmas que allí se manejaban.
De acuerdo con un reciente artículo de El Espectador, el panorama que se avecina para las empresas del Grupo Empresarial Antioqueño estaría causando molestia en sus juntas directivas.
Grandes compras
En los años 80 Jaime Gilinski tomó la decisión de comprar la filial colombiana del Banco Internacional de Crédito y Comercio (BCCI), en ese entonces conocido por ser la entidad financiera más corrompida del mundo. Sin contemplaciones, el joven Jaime le cambió el nombre, renovó a su junta directiva y lo dejó en números negros en cuestión de meses.
A comienzos de este siglo, la familia adquirió el Banco Sudameris, al cual puso su apellido y fusionó con el Banco Tequendama, la filial colombiana de HSBC y la red de cajeros Servibanca. El éxito de esos movimientos metió a Jaime a los primeros puestos de la lista Forbes de los hombres más ricos de Colombia.
Hasta las ofertas públicas de adquisición hacia las empresas del GEA, la compra más visible de la familia en los años recientes fue el Grupo Publicaciones Semana. En enero de 2019 compró el 50% de las acciones, con lo cual el grupo mantuvo cierta autonomía editorial. En noviembre de 2020 compraron el 50% restante y causaron un revolcón en la nómina. Con todo ello, el medio es el tercero más consultado del país.
Un revolcón así podría asomarse en las tres empresas que están adquiriendo paulatinamente, pero podrían encontrar cierta resistencia.
Las juntas
Según El Espectador, conformar las juntas directivas de Sura y Nutresa implica aplicar una serie de reglamentos estrictos. Uno de ellos es garantizar la participación de un número mínimo de accionistas minoritarios para proteger sus intereses. Además, los miembros son propuestos mediante listas y asignados por un cociente electoral.
Al obtener el resultado de la fórmula matemática, los Gilinski obtienen un 1,93: ya tendrían asegurado al menos un puesto en la junta directiva de Sura y Nutresa y, además, tienen una gran probabilidad de tener puestos adicionales —lo cual depende del resultado de las otras listas—.
En contra
Las juntas directivas actuales de estas importantes empresas están compuestas por personas de alto prestigio y preparación, por lo cual prestan mucha atención a los movimientos de la bolsa de valores para proteger sus intereses.
Al analizar las OPA recibidas, todas las juntas directivas concluyeron que el precio ofrecido era insuficiente para el valor de sus empresas. Además, según una denuncia de Daniel Coronell en la emisora La W, Sura hizo una reclamación ante la SIC por haber mantenido reserva sobre la existencia de la OPA, la cual existía desde 2020 e impidió desde entonces que otros interesados presentaran mejores ofertas.
Asimismo, se reclamó ante la Superfinanciera que el director de esa entidad de vigilancia siempre debía dar el visto bueno antes de ejecutar una transacción que implicara hacerse con más del 10% de una entidad. Dicha venia ocurrió después, lo cual es legal pero inédito.
Entonces, la familia Gilinski entrará a una junta directiva que no los acogerá con agrado y se concentrará en evitar adquisiciones mayores.
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