La alcaldesa de Bogotá iniciando el 2022, reconoció que en materia de seguridad para Bogotá el 2021 fue un año muy difícil, pese a que la tasa de homicidio registrada fue por debajo de la nacional, que fue del 11%, la alcaldesa en diálogo con Noticias RCN manifestó que sigue siendo dolorosos los hechos que se presentaron y dieron como resultado un 7%, pero, indicó se está trabajando en varios aspectos con los que espera mejorar los hechos de hurto y violencia en la capital.
Pese a que en las últimas cifras, el 2021 registró un diciembre con los más bajos índices de homicidios de los últimos 18 años, López aceptó que la lucha ha sido contra la criminalidad, pue el atracó violento llegó 12%, sin embargo, manifestó que para el 2022 se espera un mejor año por cuatro factores: disminución de la pobreza, descenso en cifras de desempleo, incremento de la fuerza pública y fortalecimiento de la ley de seguridad ciudadana.
La primera es bajar los índices de pobreza que causó y acrecentó la pandemia, y esto espera lograrlo gracias a la renta básica que posee Bogotá.
“Va a ser un mejor año, porque va a bajar la pobreza que se nos duplicó y llegó al 40% y que se nos va a bajar al 32%. Asimismo, la extrema que llegó al 13% va a volver a bajar al 5%. Y esto se debe a algo de lo que se deben sentir orgullosos los bogotanos, Bogotá es la única ciudad de Colombia que cuenta con una renta básica, la cual le ha ayudado a las familias a salir del hambre, de la pobreza y a volver a la educación”, indicó Claudia López.
Como segunda medida, la mandataria bogotana sostuvo que habrá una baja en la tasa de desempleo en la capital, pues señala que se han dado apertura a programas desde la alcaldía para que tanto jóvenes como población en general vuelvan a la plazas de trabajo y contribuyan a la economía capitalina.
“El desempleo que se nos disparó al 25%, ya bajó al 11.8% y va seguir bajando en el 2022″, precisó la mandatario al noticiero.
Y como tercer medida, está el trabajo de la mano que están realizando con la Policía y las autoridades competentes para tener vigilancia y control de varias zonas de Bogotá.
“Bogotá tiene hoy 3.300 policías adicionales a los que tenía cuando empezó el año 2021″, destacó.
Y por último, habló de la importancia de lograr ciertas reformas en la justicia, pues cambió la manera como se tratan algunos delitos de los delincuentes que por lo general, según la alcaldesa, eran detenidos pero por falta de una denuncia nuevamente resultan delinquiendo en las calles.
“Gracias un mejor trabajo con la justicia, creo que hemos logrado que con el Gobierno Nacional se reforme esa cuestión de que al ladrón lo capturan y luego lo sueltan, o si alguien ataca a otro con un arma de fuego un cuchillo eso sea excarcelable”, aseveró la alcaldesa a Noticias RCN.
“Esperamos que la tasa de homicidio en Bogotá baje 15% (…) La meta nacional es del 10%, pero nosotros hicimos un análisis con la Fiscalía, Policía y Secretaría de Seguridad y creemos que somos capaces de reducirla en un 15%”, informó la mandataria.
Con respecto a los momentos de violencia que aún se desatan en el Portal Américas, al suroccidente de la capital, ratificó no apoyar la militarización de la zona, argumentando que allí se ha hecho un trabajo social importante que logró reducir las jornadas tanto de protestas como de vandalismo.
“Tanto en Américas, Usme y Suba, los vecinos de esos portales tuvieron que soportar 80 días de enfrentamientos, de bloqueos y vandalismo, pero luego poco a poco desde julio hasta diciembre hemos podido bajar el número de días de problemas de orden público en la zona, entonces pasa de 80 días a uno, sin embargo, eso tiene que dejar de existir, porque ningún vecino puede resultar afectado”, señaló la alcaldesa.
Al finalizar agregó, que lo primero que hay que hacer es reconocer que hay un problema social. “La verdad es que se aprovechan los delincuentes y son oportunistas de las dificultades que trajo la pandemia para los jóvenes, por eso creamos el programa parceros, ahora están estudiando, creamos becas gratuitas y así queremos quitarle de las garras del microtráfico los jóvenes que ni estudiaban, ni trabajaban”.
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