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Según el Ministerio de Salud de Colombia, entre el 17 de febrero y el 31 de diciembre de 2021 se aplicaron 64.690.489 vacunas contra el covid-19 en el territorio nacional. Motivo por el cual las autoridades sanitarias han considerado que es momento de exigir en lugares públicos el carné de vacunación contra el covid-19 con su esquema completo.
Y aunque para millones de colombianos inocularse contra el virus ha sido una prioridad, hay otra gran cantidad para los cuales este proceso está lleno de incógnitas y por eso su decisión ha sido rechazar a toda costa que les sean suministradas las respectivas dosis que ofrece el Gobierno.
El movimiento ‘Familias por la verdad’, por ejemplo, es la respuesta de un equipo multidisciplinario de activistas cristianos pro-vida y pro-familia a “la censura y el ostracismo mediático desplegado sobre la investigación independiente y las posturas críticas al plan mundial de vacunación publicitado en los medios de masas como ‘única solución’ para, supuestamente, prevenir y combatir la enfermedad ocasionada por el SARS-CoV-2”. Entre los líderes de este movimiento está la familia de Marco Fidel Ramírez, exconcejal de Bogotá.
Y aunque su postura ha generado bastantes cuestionamientos, en horas recientes recibieron una respuesta favorable de la Defensoría del Pueblo al derecho de petición que interpusieron para declarar, de manera juramentada y ante una notaría, su determinación de no vacunarse contra el coronavirus.
Esta iniciativa, denominada ‘pasaporte ciudadano de inmunidad constitucional y natural’, ofrece la posibilidad de imprimir un par de documentos que los detractores del medicamento para combatir el covid-19 presentan a quienes les exijan el carné de vacunación.
“Puedes imprimir el pasaporte ciudadano de inmunidad constitucional y usarlo así no más, llevándolo contigo, mostrándolo donde no te dejen ingresar, pues ya el mismo carné tiene todo el insumo constitucional que explica las razones por las cuales no te pueden violar tus derechos. El mismo QR del pasaporte lleva a ampliar esta información. Pero si también quieres, puedes hacer la declaración juramentada en cualquier notaría del país, la llevas impresa y en digital, dices que vas a hacer una declaración juramentada de objeción de conciencia frente a la vacunación C-19 y pasas el archivo de la declaración que descargaste de la web de ‘Familias por la verdad’”, explicó en su cuenta de Instagram Natalí Torné Torres, líder del movimiento.
Según los argumentos jurídicos en los que se basan estos documentos, la vacunación en Colombia no es obligatoria y ninguna persona está obligada a recibir un medicamento, tratamiento o vacuna en contra de su voluntad (artículo 10 - numeral D de la Ley estatutaria de Salud o Ley 1751 de 2015).
Además, agregan que la persona que amenace o vulnere la voluntad de quien firma el pasaporte “podría incurrir en los delitos de constreñimiento ilegal, hostigamiento y discriminación, según los artículos 132, 134A, 134B, 134C y 182 del Código Penal (Ley 599 del 2000)”.
“El pasaporte y la correspondiente declaración Juramentada son dos documentos que se necesitan mutuamente para generar los efectos jurídicos en defensa de tus derechos fundamentales”, agregó Torné en su explicación.
De igual manera, ‘Familias por la verdad’ ha puesto a disposición en su página web modelos de cartas redactadas por juristas para que no se exijan estos documentos en instituciones educativas o a la hora de viajar.
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Son varias las figuras del entretenimiento colombiano que han aplaudido el pasaporte antivacunas, entre ellos las modelos Natalia París y Elizabeth Loaiza. Sin embargo, otros como Nicolás Arrieta, creador de contenido para redes sociales, han cargado en contra de lo que consideran un “absurdo”.
Para el youtuber bogotano, es ilógico que quienes han pasado varias veces por el quirófano e incluso han librado una densa lucha contra los biopolímeros que se inyectaron en el pasado, sean las primeras en rechazar las vacunas contra el covid-19 “por no saber de qué están compuestas”.
“No sé por qué me sorprende que los primeros en promocionar estos pasaportes sean modelos o influenciadores que no se quieren vacunar, según ellos, porque no saben qué hay en el medicamento y porque el Gobierno no te puede decir qué hacer, pero pues sí se inyectan biopolímeros en el culo (...) se inyectan drogas, se huelen de todo y ahora no se van a vacunar ”, concluyó Arrieta por medio de unas historias que publicó en Instagram.
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