Piden a la Procuraduría suspender las corralejas de Sincelejo

Viene el 20 de enero, el inicio de las tradicionales fiesta de Sincelejo (Sucre), que alista los escenarios de lo que será la nueva celebración. Uno de ellos ha generado polémica porque se trata del redondel de madera y la arena para la corraleja, un evento que pese a su fama, hace nueve años que no se ve en el municipio.

Activistas y ciudadanos se han manifestado en numerosos escenarios y redes sociales para impedir el retorno de las corralejas en Sincelejo. La administración municipal asegura que no ha otorgado los permisos. Y el empresario que construye el escenario afirma que ya entregó toda la documentación correspondiente para recibir el visto bueno.

“Aquí tenemos el permiso inicial que es el que nos da el visto bueno a nosotros para la construcción de la corraleja. Ya se radicó toda la documentación que nos piden para la realización de la corraleja”, afirmó Luis Emiro Sierra a Noticias Caracol, empresario representante del evento y que pretende revivirla.

La administración municipal de Sincelejo afirmó a ese informativo que la licencia de construcción para el escenario es urbanística y no autoriza la realización de corralejas. Aclararon que hasta el momento no se ha autorizado el evento y que no consiste únicamente en cumplir los requisitos.

“Esta es una corraleja que le hemos llamado el Renacer, es la más grande de Colombia y a la que muchas personas quieren asistir, por eso nos estamos preocupando para darles las garantías y seguridad a todas las personas que nos van a visitar”, afirmó Sierra al diario El Heraldo, quien da por hecho la autorización y espera recibir 6.000 espectadores y tiene espacio para más de 1.500 vehículos.

Colectivos y representantes animalistas y la candidata a la Cámara Andrea Padilla buscan ponerle freno a las corralejas de Sincelejo. A través de una carta al alcalde Andrés Gómez Martínez, advirtieron que emitir autorización para esos eventos podría llevarlo a incurrir en delitos penales y faltas disciplinarias.

Uno de los argumentos es la suspensión de esas actividades por más de ocho años, debido a que la sentencia C-666 de 2010, la Corte Constitucional afirmó que los eventos que implican maltrato animal “únicamente podrán desarrollarse en aquellos municipios o distritos en los que las mismas sean manifestación de una tradición regular, periódica e ininterrumpida y que por tanto su realización responda a cierta periodicidad”.

La suspensión, sostienen los defensores de animales, generó que las corralejas de Sincelejo ya no cumplan con las características que determinan su tradición, por lo que afirman que la Alcaldía no podría autorizarlas o contravendría una sentencia constitucional.

Así mismo, reiteran la sentencia de la misma Corte, en la que se establece que las actividades de entretenimiento con animales “deben, en todo caso, recibir protección especial contra el sufrimiento y el dolor durante el transcurso de esas actividades”. No se autoriza el uso de elementos cortopunzantes, que causen lesiones a los animales ni su maltrato. Así mismo, las autoridades municipales no pueden auspiciar o participar, pero deben garantizar el bienestar de los seres sintientes.

Padilla también envió los argumentos a la Procuraduría de Sucre para que ejerza vigilancia del proceso, argumentando también que los documentos de autorización y protocolos y pólizas no han sido publicados, por lo que los ciudadanos no contarán con tiempo para anteponer requerimientos, lo que constituiría una falta.

El municipio de Caucasia, en Antioquia, concluyó el pasado 3 de enero las corralejas del municipio y se incumplió la ordenanza de la Secretaría de Ambiente de la Gobernación, que había exigido la protección de los animales y el cumplimiento de la sentencia.

El balance de ese evento, de acuerdo con el diario El Tiempo, fue de 22 personas heridas, hasta cinco caballos lesionados de los cuales uno murió, así como cuatro toros muertos que fueron atacados con banderillas y armas cortopunzantes. Ya se radicaron quejas disciplinarias para que la Procuraduría investigue al alcalde.

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