Las borracheras y fiestas de Juan Francisco Gómez Cerchar, alias ‘Kiko Gómez’, son reiteradas, pese a la sorpresa que causó un video en el que se le vio celebrando con whisky y cerveza, en compañía de otras personas y con videollamada a Poncho Zuleta en su celda de la cárcel La Picota, donde purga una pena de 55 años por múltiples homicidios que ordenó en La Guajira.
La reciente fiesta la realizó para celebrar Año Nuevo, pero se difundió un video de la celebración, que obligó al Instituto Nacional Penitenciario y Carcelario (INPEC) a decomisarle una botella de whisky, siete latas de cerveza, cinco celulares, siete manos libres y ocho cargadores.
Todos estos son elementos prohibidos para los presos que han ingresado en varias ocasiones más a la celda del exgobernador de La Guajira, condenado por homicidio agravado, tentativa de homicidio y tráfico, fabricación y porte de armas desde hace más de 4 años; y quien está preso desde 2013. Al menos en dos inspecciones, los guardias del INPEC han encontrado ese tipo de artículos en poder del condenado.
La primera inspección en su celda por la que cursan investigaciones fue en el año 2015, cuando los dragoneantes del INPEC hallaron ocho botellas de licor y equipos tecnológicos y de comunicación al interior de su celda. Lo mismo ocurrió en 2020 cuando se le encontraron otras botellas de trago y elementos prohibidos.
El coronel Wilmer José Valencia, director de La Picota, confirmó a la emisora Blu Radio que por esas dos ocasiones se abrieron investigaciones penales en contra de tres funcionarios del INPEC, quienes habrían ayudado al condenado para ingresar esos elementos, al parecer, a cambio de altas sumas de dinero.
Según la emisora, los tres fueron imputados el pasado mes de abril al determinarse que en una camioneta del INPEC ingresaron a la cárcel 10 botellas de vino, cinco de ron, 16 de whisky, 35 litros de aguardiente, 12 six pack de cerveza en lata
El coronel aseguró que uno de los dragoneantes fue privado de la libertad y dos más se encuentran vinculados al proceso que se sigue en la Fiscalía 23 especializada anticorrupción. Ahora, se abrió otra investigación en contra de los presos que compartieron con Kiko Gómez en la celda y se determinará las responsabilidades de los funcionarios del pabellón de servidores públicos para conocer si permitieron el ingreso de los elementos prohibidos.
Se espera también que Kiko Gómez sea sancionado por esa falta. Las autoridades carcelarias solicitaron al juez de ejecución de penas que anule 180 días de redención de la condena, que había ganado el recluso por trabajos y estudio al interior del penal.
Así mismo, el INPEC informó por medio de un comunicado que por la situación conocida, Gómez Cerchar podría ser sancionado con la prohibición de visitas hasta por un año, así como anotaciones de faltas en sus antecedentes que afectan la redención de penas.
En 2017, Kiko Gómez se convirtió en el mandatario con la mayor condena en el país. El juez octavo especializado de Bogotá le impuso 55 años de cárcel por haber ordenado el homicidio de Henry Ustáriz, esposo de la exalcaldesa de Barrancas Yandra Brito, y el conductor Wilfredo Fonseca.
Los dos primeros sufrieron un ataque sicarial cuando se movilizaban en un vehículo en la carretera que dirigía a ese municipio desde Fonseca, el 2 de abril de 2008. Según el juez, Gómez Cerchar planeó y ordenó el asesinato por diferencias políticas.
Brito denunció el hecho vinculando al gobernador de La Guajira Kiko Gómez y fue asesinada por varios impactos de bala el 28 de agosto de 2012 en Valledupar. El condenado ordenó esos crímenes junto a la banda criminal de alias Marquitos Figueroa.
Posteriormente, fue condenado a 40 años de prisión por la responsabilidad en el asesinato del concejal Luis López Peralta en 1997, Luis Rodríguez y Roa Cabrera en el 2000, también junto a la banda criminal, con quien los jueces probaron un estrecho vínculo.
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