El surgimiento y consolidación de grupos armados en Colombia se ha visto evidenciado en los niveles de violencia que se vivieron en el 2021 y continúan en el 2022. Las muertes de civiles, desplazamientos, amenazas y otras son algunas de las muestras del conflicto armado que se agudiza cada vez más en zonas rurales y en tierras que históricamente han sido olvidadas por el Estado. Un ejemplo es lo que esta sucediendo en Arauca y a esto se le suma el atentado sicarial que se registró este 4 de enero en las horas de la mañana en el departamento del Chocó.
De acuerdo con lo reportado por Blu Radio, dos personas, un hombre y una mujer, resultaron heridas luego de que delincuentes lanzaran un explosivo contra una prendería en el barrio Kennedy de la ciudad de Quibdó. De acuerdo con los primeros reportes, los heridos fueron trasladados de forma inmediata al Hospital local por miembros de la comunidad.
Por otro lado, las personas de la comunidad alertaron a las autoridades sobre un panfleto que está circulando por chats en el que supuestamente el grupo ilegal denominado Los Mexicanos, amenaza con tomar medidas frente a la queja de la comunidad y a los operativos de la Fuerza Pública. Cabe señalar que los dos hechos se encuentran en investigación y las autoridades estarían averiguando si los panfletos y amenazas estarían relacionadas con el ataque con explosivos.
Rescatada mujer secuestrada en Chocó, criminales pedían 100 millones por su liberación
100 millones de pesos pedían los delincuentes que secuestraron a una mujer en el municipio de Tadó, en el Chocó. La víctima se encontraba trabajando en una mina de oro cuando fue retenida violentamente por parte de hombres armados. De acuerdo con lo que reportaron medios de comunicación nacionales, los culpables de ese plagio fueron integrantes de las disidencias del frente 34 de la desaparecida guerrilla de las FARC. Los familiares de la mujer fueron avisados del secuestro a través de una llamada extorsiva. Las autoridades lograron rescatarla luego de hacer seguimiento a su caso ante la denuncia de sus allegados.
El secuestro cometido sobre la mujer se habría dado, entre otras cosas, con fines de explotación. Tal y como lo descubrió la Policía, además de la retención de la mujer, los criminales obligaron a la mamá de la trabajadora a hacer labores de limpieza y cocina en la casa en la que había sido internada su hija, en medio de la selva. Según reveló ella, si no hacía lo que le pedían, la asesinaban.
“Exigían 100 millones de pesos por su liberación, además, le dieron indicaciones a la madre de la mujer secuestrada para que se desplazara a una vereda donde le entregaban a su hija, de lo contrario, atentaban contra la vida de ella”, dijo el mayor general Fabián Cárdenas, director antisecuestro y antiextorsión.
Para el rescate, las autoridades, en un grupo conformado por el Gaula de la Policía y el Ejército, siguieron a la mamá de la víctima por cerca de cuatro horas para hallar el lugar en el que estaba secuestrada su hija. Al final, lograron llegar a la vivienda ubicada en la vereda Betania. En la operación, uno de los secuestradores fue neutralizado por los uniformados, los demás lograron escapar de la zona. Tal y cómo lo detalló la autoridad, fue sencillo para los demás criminales darse a la fuga por las condiciones de la zona. Es boscosa, húmeda y pantanosa.
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