“Estoy acostumbrado a sus acusaciones falsas”: Juan Manuel Santos responde a la denuncia de Álvaro Uribe

El Premio Nobel aprovechó la carta para dejar por sentado que el país está cansado de ver pelear a los expresidentes y llamó a su antecesor a hacer la paz, “pero no la de Santos”

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Juan Manuel Santos y Álvaro Uribe (AP)
Juan Manuel Santos y Álvaro Uribe (AP)

La pelea entre los expresidentes colombianos Juan Manuel Santos y Álvaro Uribe se volvió a avivar este 19 de diciembre, cuando el primero aseguró que su homólogo lleva más de diez años acusándolo falsamente de diferentes situaciones. La aseveración quedó por escrito en una carta abierta que el Premio Nobel de Paz 2016 publicó en sus redes sociales para responder a su homólogo, quien hace cuatro días lo denunció penalmente ante la Fiscalía General de la Nación.

Santos asegura que las constantes acusaciones de Uribe son una estrategia para llamar la atención y ganar adeptos de los ciudadanos gracias a la polémica. En la carta, que se extiende una página y media, el político menciona varias acusaciones que le ha hecho el expresidente antioqueño, incluyendo la nueva demanda en la Fiscalía, que tilda como “cortina de humo”.

“No me sorprendió su última denuncia penal. Estoy acostumbrado a sus acusaciones falsas y a sus ataques sin fundamento. Han sido demasiados en más de diez años. (...) La lista de infundios es interminable. Lo último y más reciente: que yo llame a los magistrados de la Corte Constitucional para que negaran la acción que usted interpuso. Nada más compraron la realidad, como ya se comenzó a saber. Esta acusación, al igual que todas las anteriores quedará como lo que es: otra cortina de humo para producir efectos mediáticos y político”, aseveró Santos.

Hay que recordar que la denuncia interpuesta dice que Santos habría presionado a magistrados de la Corte Constitucional para que votarán contra Uribe y así se mantuviera su condición de imputado penal en el caso que se adelanta contra este por presunta manipulación de testigos. Los abogados del expresidente antioqueño expusieron que el nobel habría llamado al magistrado Alejandro Linares, antes de la votación, para que se fuera contra Uribe.

Santos sostiene que eso es falso, pues aunque le interesan los temas del país, no está pensando en cazar peleas políticas en forma de represalia. De hecho, el Nobel aprovechó la carta para dejar por sentado que el país está cansado de ver pelear a los expresidentes y que, incluso, él también está cansado de hacerlo.

Así las cosas, dijo que deberían “dejar de dar tanta lata y hacerse a un lado para que puedan surgir nuevos liderazgos en el país. Santos listó los problemas que tiene Colombia en temas de economía, seguridad, credibilidad y medioambientales, y dijo que si los expresidentes se van a referir a estos temas debería ser para aportar a la construcción de país, no para reavivar peleas políticas.

“Expresidente Uribe: el país entero está hasta la coronilla e indignado por las peleas entre los expresidentes, y en particular Uribe vs. Santos. Le haríamos un gran servicio a Colombia si en lugar de dar tanta lata, - por ejemplo en estas elecciones, como yo ya procuro hacerlo-, permitimos que surjan nuevos liderazgos para que afronten los inmensos retos que tiene el país (...) Cómo resolver estos problemas en lo que la gente quiero ir. No a los expresidentes peleándose como perros y gatos. El desafío es inmenso, pero -repito- ya no es no es nuestro”, dijo Santos.

Para finalizar, en el documento Santos reafirma su deseo de no seguir peleando con Uribe. Le propone una especie de tregua, así como sucedió en Estados Unidos entre los expresidentes John Adams (1797 - 1801) y Thomas Jefferson (1801 - 1809)., quienes eran rivales políticos pero se aliaron para defender los intereses del país norteamericano.

“Lo invito a que sigamos el ejemplo de los presidentes que precisamente sucedieron a Washington: Adams y Jefferson. Ambos gobernaron uno detrás del otro, como usted y yo. Ellos fueron aliados y después acérrimos rivales, como usted y yo. Pero antes de morir tuvieron la inteligencia de reconciliarse, para partir sin odios y en paz. No en “la paz de Santos“, que a usted no le gusta, sino en la paz del espíritu, la que todos los seres humanos debemos buscar”, finalizó Santos.

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