Tras un lío jurídico y un atentado que amenazó la vida y seguridad de los excombatientes de la ETCR Urías Rondón en el Yarí, Meta, 45 de ellos acompañados de sus familias será trasladados este viernes hasta un nuevo espacio en el municipio de El Doncello, de Caquetá.
El traslado, según explicó el director general de la Agencia para la Reincorporación y la Normalización (ARN) Andrés Felipe Stapper, se había ordenado desde el 2019 debido a que los comparecientes de las Farc ofrecieron el predio en el Yarí dentro de los bienes de reparación a las víctimas que deben entregar, como parte del Acuerdo de Paz.
Allí inició la concertación y planificación que se debió acelerar después de que los grupos armados produjeran riesgo de desplazamiento a los excombatientes, con amenazas y ataques que causaron temor en los habitantes.
El pasado 18 de noviembre, cuatro vehículos asignados como esquema de seguridad a una excombatiente fueron incinerados cerca del espacio territorial de reincorporación. A lo que se sumó el atentado que causó la muerte de dos militares el pasado 7 de diciembre en inmediaciones del mismo espacio. Por lo que los excombatientes anunciaron que saldrían este 17 de diciembre, así no contaran con garantías.
Las labores de traslado se agilizaron ante la amenaza de la seguridad y se concertó el traslado para esta semana. La ARN puso a disposición varios helicópteros, según Strapper, civiles, para trasladar a los excombatientes de manera rápida hacia El Doncello.
Sin embargo, horas más tarde los excombatientes se negaron a utilizar ese medio de transporte porque no garantizaba la seguridad de las personas del municipio de Yarí. “Al plantearse un transporte helicoportado en un contexto de militarización del territorio, se expone a las familias asentadas en el ETCR Urías Rondón a un mayor riesgo. El uso de helicópteros será leído por las comunidades y demás actores con presencia en la región como parte de la respuesta militar que hasta el momento se ha dado a la crisis humanitaria”, señalaron por medio de un comunicado.
Además sostenían que en el territorio existe arraigo de la comunidad con familiares y amigos que se negaban a poner en riesgo por su traslado. “Una acción como la propuesta por el Gobierno Nacional solo derivaría en afectaciones a ese tejido y arraigo construido por cada uno y una de las firmantes de paz”, aseguraron.
Finalmente, fue hasta este jueves que se permitió llegar aun acuerdo luego de descartar los helicópteros y convocar una caravana de 33 camiones y 4 buses para el traslado de los excombatientes y sus enseres a un predio de 70 hectáreas en El Doncello. De acuerdo con la ARN, a las 9:00 de la mañana del viernes iniciará el proceso. Que ahora tardará 7 horas de viaje terrestre y para el que se dispondrá de alimentación, hidratación.
Habrá un dispositivo de seguridad con la Policía y el Ejército, aunque el traslado será liderado por la Defensoría del Pueblo, tanto al inicio como al final de la caravana. Habrá acompañamiento permanente de la Misión de Verificación de la ONU en Colombia y la Misión de Apoyo al Proceso de Paz en Colombia de la Organización de los Estados Americanos (OEA).
“En la tarde de ayer llegaron al antiguo ETCR del Meta los 3 buses que transportarán a las personas y los 32 camiones que llevarán los animales y los enseres domésticos y de proyectos productivos hasta el Caquetá. Hemos cubierto hasta el más mínimo detalle, pues la caravana incluso contará con un vehículo taller que podrá solucionar rápidamente cualquier contingencia a lo largo del recorrido, que estimamos tomará cerca de 8 horas”, sostuvo Strapper.
En el predio San José de Caquetá, los excombatientes deberán vivir en carpas Better Shelter para cada núcleo familiar, que cuentan con una estructura de marco de acero anclada al suelo, revestida con paneles de techo y pared ligeros resistentes, según explicó la ARN. Cada unidad incluye cuatro ventanas, cuatro aperturas de ventilación, una puerta con cerradura, un panel solar para iluminar una lámpara integrada, y energía para cargar dispositivos electrónicos para más seguridad, protección y privacidad.
Estas carpas serán temporales, según dijo el director de la ARN, pues se iniciarán los estudios para la construcción de las viviendas permanentes que se entregarán a las familias que decidan quedarse en ese espacio. Aseguró que ya están los estudios de prefactibilidad, pero se debe analizar las necesidades de cada uno.
Los excombatientes continúan esperando la reposición de los vehículos que fueron quemados en el primer ataque que no han sido reemplazados, según el sindicato de la UNP, por falta de las gestiones del director de esa entidad. Hicieron un llamado también a las comunidades aledañas para acompañar el proceso y garantizar seguridad.
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