Sara Tufano y Juana Afanador, las feministas que perdió el Pacto Histórico para el Congreso

En marzo de este año las activistas renunciaron a Colombia Humana de Gustavo Petro para llegar al Polo Democrático donde anunciaron su aspiración al Congreso, pero al no ver garantías dentro el Pacto Histórico decidieron renunciar

Guardar

Sara Tufano y Juana Afanador son dos de las activistas del feminismo en Colombia que más se han destacado en los últimos años por sus aportes en los debates políticos entorno a diferentes temas, siempre basados en la importancia del rol de la mujer. Mientras Afanador es socióloga y líder de la Veeduría al Metro de Bogotá, Tufano es socióloga y columnista de El Tiempo.

Ambas venían acompañando el proyecto político de Gustavo Petro desde las elecciones de 2018 pero hubo una ruptura en las elecciones regionales de 2019 cuando ese movimiento decidió apoyar la candidatura del periodista Hollman Morris, a pesar de ser señalado de acosar a la periodista María A. García de la Torre.

Una ruptura que al parecer no se solucionó por lo que en marzo de este año Tufano y Afanador renunciaron al movimiento petrista y se afiliaron al Polo Democrático, que igualmente hace parte del proyecto que lidera hoy el exalcalde de Bogotá: el Pacto Histórico.

Desde el Polo, las feministas vieron una oportunidad para llegar al Congrego, Tufano como candidata al Senado y Afanador a la Cámara de Representante. Pero nuevamente se toparon con varios obstáculos en el camino.

Por un lado, Tufano aseguró en su columna en El Tiempo que si bien apoyó incondicionalmente la campaña de Gustavo Petro y de Ángela María Robledo en 2018, esta vez no puede hacer lo mismo por la llegada al pacto de varios políticos cuestionables como el pastor cristiano Alfredo Saade o la eventual llegada del exgobernador Luis Pérez.

En el texto explicó que pese a varias alertas que tuvo sobre ese movimiento siguió creyendo en él. “Hasta que llegaron Saade y Luis Pérez al Pacto Histórico. Y frente a la adhesión de Saade y a la posible llegada de Luis Pérez y de César Gaviria, Petro ha dicho que ‘poner líneas rojas no lleva sino al sectarismo’, es decir, está justificando estas adhesiones sin creer que es necesario darle explicaciones a su electorado”, escribió Tufano.

También dijo que en medio de su aspiración al Senado dentro del Pacto, vio que las demandas de las regiones no son escuchadas y eso “demuestra el talante autoritario” del liderazgo de Gustavo Petro.

“Ha quedado demostrado que su liderazgo se basa mucho en el fanatismo. Nadie puede cuestionar a Petro porque en seguida es visto como un enemigo o como un ‘infiltrado del uribismo’, como me han dicho a mí y como muy seguramente me dirán después de esta columna”, dijo la feminista.

Por su lado, Afanador comentó que su decisión de abandonar su aspiración a la Cámara obedece a que no encontró garantías para participar en esa contienda dentro del Pacto.

“Confieso que mis expectativas fueron languideciendo progresivamente. El mecanismo de listas cerradas se convirtió en privilegio de fidelidades, promoción de delfinazgos y estimulo a mecanismos propios de la vieja política que, se supone, debemos superar. A unos días del plazo para tener listas definitivas, crecen las dudas, los debates, la incertidumbre y la poca claridad frente a los criterios de definición del orden de la lista”, denunció la socióloga.

Puso de ejemplo los debates sobre la conformación de las listas a la Cámara en Bogotá, Atlántico, Antioquia, Nariño y Valle del Cauca, que son síntomas desalentadores.

“A lo anterior se suma que las aspiraciones de nuestros mejores cuadros, como el senador Wilson Arias, hoy penden de un hilo, gracias al desacertado mecanismo de las listas cerradas”, confesó Afanador.

Anunció que si bien deja la aspiración seguirá trabajando por el Pacto Histórico.

“Renuncio a mi aspiración, pero no renuncio a un proyecto colectivo que puede materializar los anhelos de las mayorías desposeídas en Colombia. Seguiré luchando desde los lugares que la vida me ofrezca por una sociedad más justa”, señaló.

Así, el Pacto Histórico se queda sin dos feministas importantes del país que podían llegar con banderas claras al Congreso.

SEGUIR LEYENDO:

Guardar