El director de Epidemiología del Ministerio de Salud de Colombia, Julián Fernández, reconoció este viernes la complejidad que existe frente a la relación entre la migración y salud pública, fenómenos que se encuentran desde hace algunos años en auge en la región, debido a la crisis económica y social en Venezuela y otros países del Caribe.
Así lo manifestó el funcionario de la cartera de Salud durante su intervención en el encuentro de ‘Migración y salud en América Latina y el Caribe’ que se se realizó en el marco del evento internacional ‘Global Health Conference of the Americas’, donde presentó algunos de los desafíos que ha tenido Colombia con el propósito de “avanzar en la garantía del derecho a la salud de los migrantes”, desde que se intensificó este fenómeno.
“Si bien los migrantes enfrentan problemas y necesidades de salud, también hay condiciones migratorias que pueden favorecer la salud, por ejemplo, con el mejoramiento de las condiciones de vida”, destacó el directo de Epidemiología, quien argumentó que la migración también puede impactar de manera positiva a la salud de los migrantes y de la población receptora.
A su vez, expresó que si bien Colombia aborda principalmente el fenómeno migratorio de Venezuela, debido a que actualmente se encuentran cerca de dos millones de migrantes en el territorito nacional, también existe la necesidad de responder a otros fenómenos migratorios como los que se presentan en la región del Urabá con el propósito de alcanzar la frontera sur de los Estados Unidos.
De igual manera, señaló que Colombia dio un paso muy importante a través de la regulación progresiva de la población migrante a través de la cual les permitirá a estos ciudadanos vincularse al sistema de salud y de esta manera mejorar los determinaste de salud, garantizando sus derechos.
“No consideramos que la migración sea un problema de salud, sino un desafío para el sistema de salud, y para toda la sociedad y por ello, en el marco de la perspectiva del derecho a la salud, consideramos que es una responsabilidad de Estado la progresiva garantía del derecho a la salud, de acuerdo con las capacidades del país”, explicó Julián Fernández.
Por otra parte, reiteró que el próximo lunes el presidente Iván Duque firmará un decreto para la vacunación contra el covid-19 de migrantes irregulares sin vocación de permanencia en la frontera con Venezuela, con el propósito de proteger a estos ciudadanos.
Con relación a los migrantes venezolanos que ingresan al territorio nacional, el funcionario señaló que la mayoría de ciudadanos extranjeros son jóvenes.
“Eso quiere decir, que la prevalencia de enfermedades crónicas es baja, pero lamentablemente son desatendidas por no tener aseguramiento y, entre las principales necesidades de salud, están las relacionadas con algunos problemas como violencias basadas en género, salud mental, inseguridad alimentaria, violencias en general, entre otras”, concluyó el director Fernández.
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