Gremio de Borja y Campaz aparta a siete jugadores a falta de tres partidos en la disputa por descender

Algunos de ellos pidieron vacaciones anticipadas, hecho que no fue bien visto por la dirigencia del club tres veces campeón de Copa Libertadores

Guardar
Con asistencia de Miguel Borja, Jaminton Campaz marcó su primer gol con Gremio. Foto: Lucas Uebel / Grêmio FBPA
Con asistencia de Miguel Borja, Jaminton Campaz marcó su primer gol con Gremio. Foto: Lucas Uebel / Grêmio FBPA

La realidad del Gremio de Porto Alegre, donde militan Miguel Ángel Borja y Jáminton Campaz, cada vez toma matices más oscuros. Los tres partidos restantes en el Brasileirão para saber si pierde la primera categoría los disputará sin siete jugadores, apartados por la dirigencia del club. Se trata de los atacantes Fernando, Léo Pereira y Everton, los defensores Léo Gomes, Paulo Miranda y Guilherme Guedes y el volante Jean Pyerre.

De los distanciados de la plantilla, el que más preocupa en Jean Pyerre, que últimamente, bajo la dirección técnica de Vagner Mancini, estaba siendo titular. Conforme con Denis Abrahão, vicepresidente de Gremio, este caso en particular obedece a que el jugador sería vendido y a que estaba “incómodo” de jugar en el equipo, hoy en la cuerda floja.

La suspensión de algunos futbolistas se debe a que estaban “pensando en las vacaciones” cuando el Tricolor Gaúcho atraviesa quizá el momento más difícil de su historia, hecho que los directivos del Gremio condenan:

“La gran mayoría, casi la totalidad, ya estaba con la cabeza en otro lugar, pensando en las vacaciones”, afirmó el vicepresidente del club, en conferencia de prensa virtual.

Ya luego, Abrahão informó que Everton y Luiz Fernando fueron quienes pidieron “vacaciones anticipadas” de manera formal y que de ninguna manera le atribuyen la crítica realidad de uno de los equipos más tradicionales de Brasil a los jugadores.

“No es que ellos sean culpados de alguna cosa, todos somos culpables de esta situación (...). Faltan diez días [ para que culmine el Brasileirão], son decisivos para nuestra continuidad en la Serie A. Necesitamos trabajar con menos gente, enfocados hasta el último partido”, precisó Abrahão agregando que la separación de esos siete jugadores contó con el aval de la dirección técnica.

Perder la categoría sería un golpe devastador para la escuadra de Porto Alegre, que solo ha obtenido dos títulos por la liga local (1981 y 1996) pero que ha representado con jerarquía a su país en la Copa Libertadores, de la cual se ha coronado tricampeón (1983, 1995, 2017).

Solo superan a Gremio en títulos del máximo certamen del fútbol a nivel de clubes en el continente Estudiantes y River Plate (ambos cuatro veces campeones), Peñarol (cinco veces ganador), Boca Juniors (con seis dianas) e Independiente (el más grande de todos, con siete coronas).

“Son tres juegos, es matar o morir. Basta de angustia, de ansiedad, ahora es matas o mueres, ganas o estás afuera. Es el momento de la verdad, es la hora del Gremio. Espero que la camisa sea honrada”, puntualizó Abrahão.

Los partidos que le quedan a Gremio para definir su suerte ante Sao Paulo (12 en la tabla), el 2 de diciembre, Corinthians (cuarto en el Brasileirão), el 5 de diciembre y Atlético Mineiro (líder del torneo), el 9 de diciembre.

De la Serie A de Brasil descienden los cuatro últimos equipos, es decir, quienes ocupan las casillas de la 17 a la 20. Gremio, por ejemplo, es décimo octavo, a cuatro unidades del 16, Bahía, por lo que no depende que otros resultados se le den para conseguir la hazaña de mantenerse en pie.

El equipo de Borja, que esta campaña ha anotado cinco goles, y de Campaz, que suma una diana, ya había descendido en dos ocasiones: 1991 y 2004.

SEGUIR LEYENDO:

Guardar