La falta de depredadores y la ausencia de fuertes sequías hizo que los cuatro hipopótamos que llegaron a Colombia provenientes del continente africano, en la década de los 80, sean actualmente considerados una población invasora y peligrosa, tema que para expertos en medioambiente ha sido un dolor de cabeza, pues a inicios del 2021 se dio una polémica tras la posibilidad de tener que ejecutar algunos de ellos como medida para controlar su reproducción.
Además, de las diferentes discusiones frente a las consecuencias que ha traído la especie al ecosistema, también se han registrado ataque a humanos y ahora se han hecho publicas denuncias que evidencian que en la zona se esta traficando con las crías de estos grandes mamíferos.
De acuerdo con Mongabay Latam, la Corporación Autónoma Regional de las Cuencas de los Ríos Negro y Nare (Cornare) —autoridad ambiental de la zona— dice que ha denunciado la venta de hipopótamos ante la policía de Doradal, pero hasta el momento no se ha hecho nada.
De acuerdo con un traficante que habló con la ONG, por la cría le pagan en promedio es de 1800 dólares. Esto se ha vuelto su trabajo y forma de subsistir por lo que agregó que la forma más fácil de agarrar a un bebé hipopótamo es alejar a la madre con piedra y luego, coger la cría y correr.
Frente a las acusaciones y la posibilidad de que al menos seis crías han cruzado frente a la estación de Policía escondidos en camionetas o camiones, en Doradal, corregimiento del municipio de Puerto Triunfo las autoridades no se han pronunciado pero los investigadores aseguran que esto puede estar relacionado con los ataques que se han presentado.
El último caso que se presentó fue el de un hombre que se acercó más de lo recomendado a una hipopótamo que estaba con su cría; y por ello el animal lo atacó para defender a su pequeño.
“Es posible que la persona involucrada en el accidente se acercara demasiado a esta hembra con su cría y los hipopótamos por su instinto protector tienden a atacar”, informó David Echeverri López, coordinador del Grupo Bosques y Biodiversidad de la Corporación Autónoma Regional de las Cuencas de los Ríos Negro y Nare (Cornare).
Después de haber sido atacada, la persona fue trasladada a un centro asistencial del municipio de Rionegro y hasta el momento permanece recibiendo los cuidados debidos.
Desde Cornare lamentaron el hecho y pidieron a los ciudadanos tener cuidado. Se insistió en que, aunque no lo parezca, esta es una especie peligrosa para la población civil.
“Se reitera el llamado a la comunidad para que evite acercarse a estos animales, así mismo la Corporación insiste en la importancia de reconocer a los hipopótamos como animales extremadamente peligrosos, ya que, a pesar de tener un aspecto afectivo y tranquilo, su comportamiento es impredecible y en cualquier momento pueden atacar, además, son supremamente ágiles y pueden correr más que cualquier ser humano”, indicó Cornare.
Esta recomendación ha generado cientos de críticas, pues la ciudadanía, incluyendo expertos medioambientales, aseguran que la responsabilidad no puede recaer en los civiles. Sin embargo, el Gobierno ha señalado que han estado tratando de esterilizar a los hipopótamos durante años, pero requiere mucho tiempo y esfuerzo, y hay pocos recursos disponibles. Puede llevar tres meses rastrear un animal individual y el procedimiento no es fácil. Los hipopótamos machos tienen testículos retráctiles y los órganos reproductores de las hembras son aún más difíciles de encontrar, según los científicos.
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