Oposición propone modificar reglamento del Concejo de Bogotá para agilizar los debates

Este jueves 25 de noviembre, el concejal del Nuevo Liberalismo Carlos Fernando Galán propuso un acuerdo político entre las diferentes bancadas del Concejo de Bogotá y la administración distrital para modificar el reglamento de la corporación con el propósito de agilizar los procedimientos y recusaciones.

En medio de un nuevo debate de la oposición en el Concejo de Bogotá, el cabildante Galán, quien ha manifestado sus reparos frente al polémico POT, propuso un acuerdo interpartidista para resolver los obstáculos que se han presentado al rededor de las diferentes iniciativas que se han debatido en la corporación.

“Hoy en el debate sobre el POT escuchamos con mucho respeto las opiniones y propuestas de las bancadas de oposición. Esto es lo que espera Bogotá de nosotros. Que desde visiones contrarias podamos construir acuerdos de ciudad y frente a la modificación del decreto estamos todos de acuerdo”, señaló el secretario de Gobierno, Luis Ernesto Gómez.

Según la Secretaría de Gobierno, la iniciativa de Galán, con la que se busca convocar a los diferentes sectores del Concejo, contempla modificar el reglamento que permite que cualquier ciudadano que “tenga intereses particulares”, pueda presentar una recusación, con la que se detiene automáticamente el debate hasta que esta se resuelva.

Debido a que este trámite que puede durar entre tres y cuatro días, suspende la discusión en el Concejo de Bogotá, “afectando la voluntad democrática de millones de ciudadanos representados en la corporación”, como sucedió con la reciente tutela aceptada por el juzgado 47 penal municipal por supuestamente no haber cumplido con el debido proceso.

“Estamos ante una trampa gravísima que permite que cualquier propietario de un inmueble que prefiera conservar el estatuto quo, pueda a través de una recusación, una tutela, o una acción jurídica paralizar el debate que le corresponde al Concejo y por ende el desarrollo de la ciudad”, indicó el secretario de Gobierno, el cual fue acusado por un cabildante verde de ofrecerle puestos en la alcaldía.

Por cerca de dos meses y medio las bancadas del Concejo de Bogotá y la administración distrital han debatido la polémica guía para la capital de la cual han denunciado varios cabildantes presiones por parte de la alcaldía e intimidaciones de la alcaldesa, Claudia López, quien ha asegurado que la corporación busca “dilatar la discusión”.

En ese sentido, indicaron que el Concejo de Bogotá tiene la función de tramitar y votar las recusaciones que impone la ciudadanía, a la vez que es deber de la administración distrital escuchar a los ciudadanos y cabildantes para que a través del diálogo se construya el Plan de Ordenamiento Territorial que beneficie a la ciudad y se convierta en la guía.

“Encontramos intimidantes y difamatorias sus afirmaciones en medios de comunicación cuando abiertamente manifiesta que la ‘discusión está llena de marrulladas para no debatir el POT’, por lo cual le solicitamos, sustente públicamente con pruebas y argumentos sus acusaciones y diga con nombre propio de dónde provienen los chantajes y quienes sabotean el proceso”, indicaron los concejales.

Este documento, que fue firmado por ocho cabildantes, evidencia la compleja situación en la que se encuentra la aprobación del Plan de Ordenamiento Territorial para la ciudad, la cual ha ahondado en diferencias con la administración distrital y entre las bancadas que encuentran falencias en este importante agenda para la capital.

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