Así se regulará el uso de teléfonos celulares en los colegios de Colombia

Con la aprobación del proyecto en la Cámara de Representantes y el Senado, la iniciativa quedó en manos de presidente, Iván Duque

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Con la aprobación del proyecto en la Cámara de Representantes y el Senado, queda en manos de presidente, Iván Duque, poner el proyecto en vigencia. (Getty Images)
Con la aprobación del proyecto en la Cámara de Representantes y el Senado, queda en manos de presidente, Iván Duque, poner el proyecto en vigencia. (Getty Images)

A través de sus redes sociales, Rodrigo Rojas, representante del partido Liberal, informó que el proyecto de ley que busca regular el uso de celulares por parte de estudiantes en los colegios pasó a sanción presidencial. Según explicó, la idea es generar entornos seguros para niños, niñas y adolescentes que todavía se encuentran estudiando y que, a su vez, usan estas herramientas tecnológicas para adelantar sus procesos académicos. De acuerdo con lo que expuso el autor del proyecto, Rojas, el planteamiento tuvo la aprobación unánime por parte de los votantes en la Cámara, por lo que ahora está a tan solo un paso de ser realidad.

“Con este proyecto buscamos contribuir al uso responsable, seguro y adecuado de los equipos de telefonía móvil en entornos escolares, para niños, niñas y adolescentes, ante las afectaciones en términos de salud física y mental, además de los riesgos en seguridad y rendimiento académico que estudios científicos han demostrado alrededor del mundo”, afirmó Rojas.

El político, además, en su cuenta de Twitter, se dio a la tarea de explicar, uno a uno, sus argumentos respecto a la creación de este proyecto que promete mejorar la vida académica de los estudiantes, y que hará que los colegios se vean en la necesidad de cambiar sus metodologías. Así mismo, habló del paso a paso de lo que vendrá con la firma del presidente, Iván Duque.

“Ha sido aprobado, por unanimidad, en Plenaria de la Cámara de Colombia, nuestro Proyecto de Ley ‘Entornos Seguros De Aprendizaje’, un proyecto muy especial para mí, pues con él buscamos contribuir al uso seguro, responsable y adecuado de equipos tecnológicos en entornos escolares para niños, niñas y adolescentes (...) Mil gracias a todos mis colegas congresistas por su apoyo y compromiso con la niñez y juventud del país”, empezó diciendo.

Con la aprobación, detalló, lo que sigue es la implementación de cuatro medidas generadas planeadas en el documento, todas ellas, direccionadas al control del uso de esas herramientas dentro de espacios de educación preescolar, básica y media.

El correcto desarrollo de las mismas comprende un trabajo conjunto entre autoridades gubernamentales, escolares, padres de familia y los mismos estudiantes. “El Estado deberá formular, implementar y hacer seguimiento de una política pública que contenga las orientaciones técnicas para el uso de las herramientas de TICs por parte de los niños, niñas y adolescentes para los niveles de preescolar, básica y media”, se lee en el planteamiento de la primera medida que compromete al Gobierno nacional directamente.

“Partiendo de que el uso adecuado de las herramientas tecnológicas es una responsabilidad compartida entre el Estado, los padres de familia y las instituciones educativas, se establece que la reglamentación de esta ley, a cargo del Ministerio de Educación, deberá involucrar a estos actores”, continuó explicando, a través de un hilo en Twitter, para darle paso a la delimitación de las tareas que cada actor debe asumir.

Las instituciones educativas, por ejemplo, tendrán que adoptar la reglamentación e incluirla en los manuales de convivencia y tendrán que establecer “dentro de acuerdos de convivencia escolar, mecanismos para dar un uso adecuado a las herramientas TIC, tanto para facilitar procesos de aprendizaje como para la protección de niños, niñas y adolescentes”.

Por el otro lado, se le entrega la facultad, de manera excepcional, explica Rojas, a las instituciones educativas para que, con previo aval del comité escolar de convivencia y el consejo directivo, puedan restringir el uso de dispositivos de telefonía móvil en determinados horarios o lugares. Todo esto, por supuesto, explicó el autor del proyecto, “siempre garantizando el derecho a la comunicación de los estudiantes”.

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