En rueda de prensa este 23 de noviembre, el senador Iván Cepeda reveló información delicada sobre 22 menores de edad que habrían muerto en bombardeos efectuados por las Fuerzas Militares durante el gobierno de Iván Duque.
“Hemos podido corroborar que producto de estas operaciones aéreas de las fuerzas militares durante el presente gobierno han muerto trece jóvenes de sexo masculino y siete jóvenes del sexo femenino, y hay dos de los cuales no hay respuesta del Instituto de Medicina Legal sobre su sexo puesto que la destrucción de los cuerpos impidió ese reconocimiento”, señaló Cepeda.
Según el senador la mayoría tenía una edad promedio entre 15 y 17 años, pero algunos tenían entre 10 y 13 años.
Así mismo, en respuesta a un derecho de petición que radicó ante el Ministerio de Defensa, este respondió que durante el gobierno de Iván Duque se han efectuado 36 bombardeos en todo el territorio nacional contra grupos armados.
“Para quienes pretenden justificar las muertes porque eran jóvenes mayores de 15 años, nos permitimos recordar que el protocolo adicional a la Convención de los Derechos del Niño de la participación de menores de 18 años en los conflictos armados fue aprobado por el Congreso y establece con absoluta claridad que se prohíbe el reclutamiento y participación de los menores de 18 años por lo que tienen una protección especial y son considerados víctimas”, condenó el senador.
Igualmente, Cepeda advirtió que la práctica de realizar ataques aéreos contra lugares en los que se encuentran inermes niños, niñas y adolescentes, tiene un carácter consuetudinario, sistemático y generalizado y que queda probado que en estas siete operaciones se ha presentado un crimen de guerra y una violación sistemática de seis principios del DIH: precaución, necesidad militar, humanidad, distinción, proporcionalidad y limitación.
“En forma sistemática el presidente de la República, el ministro de Defensa y el alto mando militar han ocultado esta información. Le han mentido al país y a la comunidad internacional con su falsa política de protección de la infancia, y cuando estos hechos se han revelado a la opinión pública por vía de control político, han procedido a justificar sin rodeos estos crímenes. El ministro de Defensa, Diego Molano, ha debido renunciar hace tiempo”, concluyó Cepeda.
El bombardeo más reciente fue contra un campamento del Ejército de Liberación Nacional (ELN) en el que se encontraban cuatro menores de edad, en el litoral San Juan, departamento del Chocó.
Tras la revelación hecha también por Cepeda, se publicó otro documento en el que se dan a conocer los nombres de dos de los jóvenes asesinados en el mismo.
La información, recogida por el Instituto de Medicina Legal, la dio a conocer el defensor de derechos humanos caleño Walter Agredo, quien reportó que ya están plenamente identificadas dos de las víctimas. Se trata de Jhon Alexander Gañán Murcia de 17 años, José Yuver Hurtado Moreno de 13 años.
Además, se conocieron los nombres de otras víctimas mayores de edad: Claudina Natigay Carampaima de 18 años, Uberman Cortés Montenegro de 21 años, Urbelina Isabel Hernández de 41 años y unos restos, en realidad unas manos, de una persona de sexo femenino que se encuentra entre los 15 y 25 años de edad.
Según el mismo documento, que presenta fotos de las víctimas, el dorsal de la mano izquierda de esa última víctima tenía un tatuaje “de una I y de un corazón hechos con tinta de color negro”.
Valga recordar que el ataque se registró el pasado 16 de septiembre.
Por este tipo de operaciones militares fue que cayó el exministro de Defensa Guillermo Botero, quien tuvo que afrontar un debate de control político en el Congreso y luego renunció.
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